Vecinos de la colonia Hipódromo e integrantes de la asamblea cannábica instalarán una mesa de diálogo para dirimir controversias respecto de la instalación de puestos de venta de mariguana en la ex glorieta Chilpancingo.

Se trata, explicó Rafael Guarneros, del comité fundacional de la Asociación de Residentes de la Colonia Hipódromo, de “llegar a acuerdos y poner orden, porque todos queremos lo mejor, tenemos derechos y vamos a conciliarlos para hacerlos valer”.

Ante “la ausencia de gobierno”, decidimos trabajar para atender las diferencias que hay en ambos grupos y restablecer el tejido social, porque “coincidimos en que dicho espacio no es una zona de tolerancia para la promoción, consumo y venta de mariguana”, puntualizó.

En conferencia de prensa, acompañado de vecinos también de la colonia Roma y algunos integrantes de la asamblea, señaló que ambos grupos “tenemos preocupaciones distintas, pero nos une un mismo espacio y realidad”.

La primera resolución fue que “vamos a instalar esta mesa de diálogo ciudadano para resolver un problema que generó el gobierno y ha llevado a que tengamos conglomerados de personas con el riesgo de un mayor número de contagios de Covid-19”.

Un vecino de la colonia Roma consideró que “el error logístico de gobierno fue haber movido a esta gente que se encontraba alrededor del Senado; fue una pésima decisión”, además de que el “conglomerado que generan los puestos favorece la delincuencia”, agregó otra vecina.

Otra más, quien no se identificó, afirmó que “una cosa es que la mariguana sea legal y otra que estén fumando en la vía pública. Estoy convencida de que, medicinalmente, es buena, pero se requiere poner reglas porque ahí hay un espacio de juegos para niños”.

Álan García, miembro de la Asamblea cannábica más conciencia menos tv, señaló que con su llegada a la glorieta han buscado “desestigmatizar la planta por medio del cultivo en una zona pública, pues tiene varios componentes que ayudan a la salud del ser humano”.

Se trata de hacer valer pacíficamente nuestros derechos a la salud, al libre desarrollo de nuestra personalidad, a la no discriminación y a la libertad de reunión, expresó al participar en la conferencia convocada por los vecinos.

Pablo Alfa, otro integrante de la asamblea, comentó que “la glorieta históricamente ha sido un lugar de extorsión, de descuido, y tuvimos injerencia de otros grupos que nos querían provocar y sacar de ahí, pero lo que buscamos es tener una mejor convivencia”.

Mencionaron que “no estamos en contra de nadie, ni a favor o en contra de algún partido político u organización comercial, estamos defendiendo el derecho a informar sobre qué es la mariguana y sus propiedades, y estamos cansados de ser objeto de persecución, de discriminación y que nos esté robando la policía nuestras cosas”.