De acuerdo con la Encuesta de Evaluación Rápida sobre el Impacto del Covid-19 (Enericov-2020) México, realizada por el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) y ONU Mujeres, por medio del Centro Global de Excelencia en Estadísticas de Género (CEEG), una mayor proporción de mujeres que de hombres perdió su empleo o cerró su negocio a causa de la pandemia.
El sondeo arrojó que 47.8 por ciento de las mujeres quedaron desempleadas o debieron cerrar sus emprendimientos, mientras que en el caso de los hombres fue 43.2 por ciento. “El impacto fue mayor para las mujeres que realizaban una actividad de forma independiente”, advierte la encuesta telefónica hecha a mujeres y hombres mayores de 18 años, realizada del 30 de septiembre al 9 de octubre de 2020, y cuyos datos fueron proporcionados por el Inmujeres a La Jornada.
En la Enericov-2020, que tuvo una muestra de mil 200 personas, del total de entrevistas efectivas; 52.5 por ciento fueron respondidas por mujeres y 47.5 por ciento por hombres.
Asimismo, 32.8 por ciento de las mujeres consultadas declaró ser el “principal sostén económico de su hogar” y, en contraparte, el porcentaje subió a 75.2 por ciento entre los hombres.
El ejercicio, en el que la mayor proporción de quienes respondieron al sondeo están entre los 18 y los 44 años de edad, reveló que “cuatro de cada 10 personas que lograron continuar con su actividad laboral durante la pandemia disminuyeron el número de horas destinadas a su actividad, tanto por la reducción de días u horarios de trabajo en el confinamiento como por el paro de ciertas actividades que se realizan en forma presencial”.
En este aspecto también hubo diferencias entre las mujeres y los hombres.
Así, 43.4 por ciento de mujeres dijo que disminuyó sus horas laborales, contra 40.4 de los hombres; 38.4 mencionó que no hubo cambios (42.9 por ciento en los hombres) y 18.3 por ciento señaló que se incrementaron sus horas de trabajo, contra 16.8 por ciento en los hombres consultados. Del universo de consultadas, 38.5 por ciento dijo que antes del confinamiento se dedicaba al hogar, 36 por ciento trabajó para un empleador o patrón, 14 por ciento tenía un negocio propio y 1.6 por ciento era pensionada o jubilada.
De este modo, 35.5 por ciento de las mujeres dijo que durante la pandemia ha continuado trabajando con su actividad desde casa, 41.3 ha continuado laborando en su lugar habitual de trabajo y 23.2 por ciento admitió que tiene ahora un esquema mixto.
