El programa Sembrando Vida, que maneja la Secretaría de Bienestar, provocó la pérdida de cobertura forestal en 72 mil 830 hectáreas (11.2 por ciento del total de la superficie beneficiada) en 22 municipios del país durante 2019, lo cual es contrario a sus lineamientos de operación, que establecen que no se deforestaría para llevar la estrategia, señala el Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés).
Los estados donde se dieron las mayores pérdidas son Chiapas, con 22 mil 424 hectáreas; Tabasco, 13 mil 390, y Veracruz, 13 mil 121.
Sembrando Vida, uno de los 10 programas prioritarios del gobierno federal, incluye a 400 mil campesinos en 20 entidades y cuenta con uno de los presupuestos más altos en la historia para un programa de desarrollo rural: 15 mil millones de pesos en 2019 y 27 mil millones en 2020, indica el reporte Análisis de los impactos en las coberturas forestales y potencial de mitigación de las parcelas del programa Sembrando Vida implementadas en 2019, realizado por Javier Warman, Iván Zúñiga y Manuel Cervera.
WRI explica que el informe fue realizado con datos obtenidos de la plataforma Global Forest Watch, y aunque se preveía la colaboración de la secretaría para obtener información sobre la restauración de coberturas forestales y captura de carbono, no tuvo acceso a la georreferenciación de las parcelas ni pudo monitorear los indicadores. Ocosingo, Chiapas, fue el municipio donde se observaron más pérdidas, con 12 mil 920 hectáreas, seguido de Othón P. Blanco, Quintana Roo, con 5 mil 829.
De acuerdo con los lineamientos del programa, éste debería establecerse en tierras ociosas o abandonadas, estar en condiciones de potrero o acahual bajo y tener cultivo de milpa, recuerda WRI. Precisa que desarrolló una metodología en la que comparó la pérdida de coberturas forestales a escala municipal en 2019, comparado con el promedio de coberturas en los cinco años previos. De esta forma, se identificó el “exceso” de pérdidas para determinar las hectáreas atribuibles a Sembrando Vida.