Ante el lento crecimiento por fuentes internas, el paquete por 1.9 billones de dólares puesto en marcha por el gobierno de Estados Unidos para su economía, dará un importante “empujón” a la mexicana, por la doble vía de un incremento en el flujo de remesas y en las exportaciones, coincidieron especialistas.

El plan fiscal estadunidense equivale a poco más de 8 por ciento de su producto interno bruto(PIB) e incluye beneficios adicionales por desempleo, más transferencias directas a las familias, apoyos a los gobiernos locales y fondos para el programa de vacunación.

Para Ricardo Aguilar, economista en jefe de Banco Invex, se trata de un paquete “sumamente fuerte” que beneficiará a México de manera directa al fortalecer el poder de consumo de las familias estadunidenses, sin contar que brindará recursos a migrantes mexicanos, los cuales incrementarán sus envíos de dinero.

La reactivación económica de Estados Unidos, aseguró el especialista, es de gran relevancia para México, dado que por sí sola representará 2.5 puntos porcentuales del 4 por ciento que espera Invex crezca la economía mexicana durante 2021.

“Al sumar este paquete, más el proceso de inmunización acelerada y los estímulos previos, calculamos que el factor externo podría contribuir con 2.5 puntos porcentuales de un estimado de 4 por ciento que tenemos para este año en México. Sin ese factor externo, este año el país estaría creciendo entre 1 y 1.5 por ciento”, calculó.

En tanto, Daniel Arias, analista económico de Monex, destacó que los estímulos fiscales aprobados por Estados Unidos propiciarán un “crecimiento acelerado para su economía”, dado que el monto acumulado del rescate supera casi en cuatro veces a la caída del PIB que registró en 2020

Desde su punto de vista, en el corto plazo la medida podría servir como catalizador del optimismo en los mercados financieros; sin embargo, debido a la dimensión del rescate, hacia el segundo semestre se corre el riesgo de que se reaviven los temores de un sobrecalentamiento de la economía.

Entre los puntos más relevantes de incentivos de EU y que más pueden beneficiar a México se encuentra la extensión de beneficios por desempleo por 300 dólares a la semana, que durarán hasta el 6 de septiembre; además de un cheque de mil 400 dólares por persona para aquellos que ganen hasta 75 mil dólares anuales.

En este rubro pueden entrar los migrantes mexicanos establecidos legalmente en Estados Unidos, que de acuerdo con el último Anuario de migración y remesas de BBVA México, ascienden a más o menos 7.5 millones.

Las transferencias directas y los apoyos por desempleo, explicó Aguilar, analistas de Invex, serán clave siempre y cuando los beneficiarios los destinen al consumo de bienes duraderos, ya que de esta forma aumentará la demanda de Estados Unidos por productos de manufactura mexicana, por ejemplo, la automotriz.

Por otro lado, resaltó el apoyo de 350 mil millones de dólares que contiene el plan para gobiernos locales, que de resultar recursos destinados para el apoyo de las industrias locales, también puede beneficiar a México, pues la demanda de bienes y servicios aumentará el flujo general de exportaciones mexicanas.

En el caso de las remesas, sostuvo, provocará que los migrantes mexicanos envíen al país recursos que por lo menos estén al nivel de 2020, es decir, en 40 mil millones de dólares.

Para ambos especialistas el paquete fiscal se traducirá en un fuerte crecimiento económico de Estados Unidos, lo que ha llevado a ajustar los estimados de crecimiento de ese país (y por consecuencia los de México), sobre todo por la “sorpresiva” aceleración que ha tenido la estrategia de vacunación de ese país. No obstante, añadió Aguilar, México debe poner de su parte e implementar medidas adicionales que permitan incentivar la economía local mediante apoyos a las familias y empresas, dado que hasta el momento los resultados en la creación de empleo han sido “decepcionantes”, además que continúan cerrando empresas pese a la reapertura económica.