El Estado mexicano mantiene “bajo resguardo” a decenas de menores migrantes no acompañados que intentan llegar a Estados Unidos para protegerlos, informaron las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE) y de Gobernación (SG).
En un comunicado conjunto, las secretarías, así como el Instituto Nacional de Migración (INM) y el Sistema Nacional DIF, señalaron que México mantiene conversaciones con el gobierno de Estados Unidos y a nivel regional para lograr la reunificación familiar de los niños, niñas y adolescentes que han viajado solos y que por ahora están en territorio nacional.
No obstante, el gobierno federal no aclaró la cifra de infantes que tiene “bajo resguardo”.
El único dato oficial hasta ahora es de la Unidad de la Política Migratoria de Gobernación, que reportó 373 presentados ante el INM en enero de este año; en tanto, el DIF indicó que ha otorgado atención a 400 menores, lo que no necesariamente implica “resguardo”.
En tanto, fuentes de la autoridad migratoria consultadas por La Jornada detallaron que en los dos primeros meses de 2021 han sido atendidos por el INM alrededor de mil infantes.
Aclararon que no se tiene un registro preciso de cuántos están en “resguardo”, cuántos han sido canalizados con autoridades estadunidenses para reunificarlos con sus familias y cuántos han sido devueltos a sus países de origen.
En enero se aprobaron reformas a la ley de migración que impide al INM detener a menores de edad en contexto migratorio, por lo que deben ser canalizados al DIF; por ello, expresaron las fuentes consultadas, no se encuentran retenidos en estaciones migratorias, sino que fueron canalizados a espacios operados por el DIF (municipal, estatal o federal) o a albergues, de donde se pueden retirar en el momento que ellos lo deseen.
La intención, agregaron, es evitar que se enfrenten a los riesgos que implica la movilidad irregular. Además, corresponderá a las procuradurías de Protección a la Infancia resolver la situación de los pequeños bajo resguardo.
Promesas de Biden, incumplidas
Con la llegada de Joe Biden al gobierno de Estados Unidos, en enero pasado, y pese a que su administración ha subrayado que no es momento de migrar porque la frontera con México se encuentra cerrada, los flujos de viajantes han crecido y muchos son de menores.
La semana pasada, medios estadunidenses reportaron que las autoridades de ese país tenían detenidos a más de 3 mil 200 niños y adolescentes en centros migratorios para adultos por más de las 72 horas reglamentarias, a pesar de que el propio presidente Biden se ha comprometido a responder de manera humanitaria a este fenómeno.
En su comunicado conjunto, las dependencias mexicanas señalaron estar conscientes de las diversas causas que orillan a los menores de edad a viajar a la frontera, por lo que se ha fortalecido el sistema en la materia para garantizar sus derechos.
“Las niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados constituyen un grupo altamente vulnerable. Es la obligación moral y legal del Estado mexicano velar por su seguridad y garantizar su bienestar.”