Comitancillo. Familiares de los 16 migrantes guatemaltecos asesinados en Tamaulipas, repatriados la víspera, enterraron a varios de ellos la tarde del sábado en medio del dolor y llamados de justicia por lo sucedido.
El resto de los migrantes muertos será sepultado el domingo, ya que sus familiares querían más tiempo para velarlos, luego que los cuerpos llegaran la noche del viernes a San Marcos, departamento fronterizo con México de donde eran originarios, dos meses después de que partieran rumbo a Estados Unidos.
La humilde casa de Elfego Roliberto Miranda Díaz, de 24 años, se llenó de vecinos que llegaron con flores y ofrendas para la familia; la mayoría eran amigos de la iglesia donde era pastor.
Magdalena, hermana de Elfego, dijo que se sentía triste “porque estamos viendo su féretro, ya no vamos a mirar su cara, hemos estado pensando cómo fue, por qué esa gente lo mató. Todos están pidiendo justicia, queremos saber por qué los policías lo mataron; deja a a su esposa (embarazada) y tres niños”.
Agregó que alguien debe hacerse responsable de los hijos, porque dadas sus condiciones de pobreza ellos no pueden. “Vamos a pedir que el Presidente de México se haga responsable de los niños”, afirmó.
La hermana de Elfego afirmó que un familiar de otro de los migrantes le llamó para decirle que intentaran comunicarse con su hermano porque había recibido una llamada donde le decían que los estaban persiguiendo policías y que estaban ocultos entre la maleza. Lo intentaron, pero el hermano no respondió.
En Comitancillo, de donde procedían 11 de los 16 fallecidos, el viernes se les ofreció una misa en el estadio local, durante la cual el sacerdote Mario Aguilón pidió en su homilía justicia y expresó que Tamaulipas era ahora un lugar de huesos, en referencia a la violencia contra los migrantes.
“Gracias a que Santa Cristina (una de las fallecidas) envió un mensaje telefónico, pudimos saber de ellos, si no, estarían enterrados en una fosa común”, señaló Aguilón.
Ricardo García, padre de Santa Cristina García, una joven de 20 años que estaba migrando en busca de una oportunidad para apoyar a su hermana menor que requiere operarse el labio leporino, dijo que se sentía más tranquilo al recibir el cuerpo de su hija y poderlo llevar a su casa. “Creo que se sacrificó, ella era una buena muchacha”, expresó.
El 22 de enero, autoridades mexicanas documentaron el hallazgo de 19 cadáveres dentro de una camioneta calcinada en la comunidad de Camargo, Tamaulipas.