Acapulco, Gro., En un ambiente festivo y con una semana de retraso, el candidato de Morena a la gubernatura de Guerrero, Félix Salgado Macedonio, inició formalmente su campaña electoral la mañana del sábado en las canchas de la colonia Emiliano Zapata de este puerto, horas después de que su partido lo ratificó como abanderado oficial.

Ante numerosos seguidores que acudieron a darle apoyo, el político guerrerense se comprometió a encabezar un gobierno austero, sensible, humano y que atienda a la gente, si le favorece el voto popular en la elección para gobernador de junio próximo. Para ello, se comprometió a realizar una campaña sin espectaculares, sin derroches.

En su discurso, Salgado Macedonio manifestó que “por única y última vez haré una declaración pública: hasta el día de hoy he sido objeto de un linchamiento político y mediático sin precedente alguno en la historia de México, auspiciado y patrocinado por poderes fácticos e intereses oscuros, cuya principal obsesión es evitar el avance de la Cuarta Transformación.

“La calumnia es el costo por luchar por el cambio y la democracia, pero representa algo mínimo cuando se persigue un ideal. Siempre he sabido que la consecuen-cia de luchar por los más altos anhelos del pueblo es padecer la calumnia, difamación y denostación por parte de quienes están en contra de la democracia, pero es una consecuencia mínima si se consigue el objetivo primordial, sacar adelante a nuestro estado, en Guerrero. La patria es primero”, puntualizó Salgado Macedonio. Afirmó que desea ser gobernador para que cambien las cosas en Guerrero: “No vamos a permitir que en la Montaña siga habiendo marginación y hambre”. Se comprometió a implementar programas que beneficien directamente a las personas, para que no vayan a buscar trabajo a otros estados o fuera del país.

El morenista señaló que su objetivo será restructurar la administración sin perder la efectividad en el servicio, En terrenos del gobierno estatal se construirán facultades de medicina, para que no haya jóvenes rechazados.

Ofreció que de ganar la gubernatura Casa Guerrero no será ocupada más por el mandatario, y se construirá un hospital de tercer nivel. Además, la casa de representación de Guerrero en la Ciudad de México será vendida para construir clínicas de hemodiálisis.

El morenista anticipó que será modificado el presupuesto en la entidad, para enfocar recursos a las secretarías que más lo necesitan, e indicó que la Secretaría de Desarrollo Social cambiará su nombre a Secretaría del Bienestar, cuya prioridad será beneficiar y empoderar a la mujer guerrerense, a quien expresó su reconocimiento.

Otra promesa será concluir el proyecto carretero que une la región costera de la entidad, a través de los 500 kilómetros que unen las regiones de Costa Chica, Acapulco y Costa Grande.