Caracas. El gobierno de Venezuela anunció ayer que someterá a revisión las relaciones con la Oficina de la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas y la renovación de la carta compromiso que mantiene con ese organismo, tras el informe que presentó Michelle Bachelet sobre la república bolivariana.
En un comunicado difundido por el canciller Jorge Arreaza, señala que la decisión se toma “ante los infundados señalamientos emitidos” por Bachelet, quien en el informe oral ante el Consejo de Derechos Humanos expresó preocupación por las supuestas “ejecuciones extrajudiciales” en operaciones de seguridad en Venezuela.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro indicó que es “preocupante” que la alta comisionada ceda a la presión de actores antivenezolanos y emita afirmaciones sesgadas y alejadas de la verdad, al hacerse eco de campañas mediáticas y presentando especulaciones ideologizadas.
“A pesar de la presencia de su oficina en el terreno y de los fluidos mecanismos de diálogo existentes con el Estado venezolano, derivados de la carta de entendimiento sobre asistencia técnica y cooperación recientemente renovada, la información que maneja y presenta la alta comisionada no dista mucho de la que difunden los gobiernos y medios que aspiran a un escenario de violencia en Venezuela”, dice.
Bachelet aseguró que en Venezuela se “ha agravado la situación humanitaria” ante las limitaciones de acceso a los servicios básicos, asistencia médica, agua, gas, alimentos y gasolina. Se mostró preocupada por el salario mensual de los ciudadanos, pues “al menos un tercio de los venezolanos estarían en situación de inseguridad alimentaria”, y aseveró que “al menos 14 personas murieron durante un operativo realizado en el barrio caraqueño de La Vega”.
El gobierno venezolano señaló que el reporte de Bachelet es emitido por el mandato de una “politizada” resolución del Consejo de Derechos Humanos, promovida por Estados Unidos por medio del Grupo de Lima.
Hace una semana, Bachelet y Maduro tuvieron una reunión a distancia, que éste calificó de “excelente” y en la que conversaron sobre los efectos negativos de las sanciones contra Venezuela y asuntos relacionados en la lucha contra la pandemia.