Los agentes fronterizos de Estados Unidos encontraron a 100 mil 441 migrantes en la frontera con México en febrero, aseguró Troy Miller, comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza del país vecino, lo que confirma el total mensual más elevado desde mediados de 2019.
Miller dijo que más de 19 mil de esos hallazgos fueron de familias, cerca de 9 mil 500 menores no acompañados y el resto adultos. Los funcionarios fronterizos aclararon que el total incluye a los que cruzan repetidamente.
El incremento ha sido aprovechado por los republicanos y por el ex presidente Donald Trump para arremeter contra Joe Biden, aunque su gobierno está regresando a casi todos los adultos que viajan solos, quienes representan la mayor parte de los cruces fronterizos, bajo una orden de salud pública implementada cuando comenzó la pandemia de Covid-19.
Entre los factores que han impulsado el incremento migratorio están el hambre generalizada en Centroamérica debido a los recientes huracanes, los estragos económicos provocados por la crisis sanitaria y problemas sociales estructurales que se remontan a años.
Los republicanos alegan que los indocumentados son atraídos por incentivos, como la propuesta de inmigración apoyada por Biden y por muchos demócratas, la cual proporcionaría una forma de obtener la ciudadanía para millones de personas que se encuentran de manera ilegal en el país.
Biden demanda al Congreso 4 mil mdd para apoyar a CA
Roberta Jacobson, la funcionaria de la administración de Biden encargada de los asuntos en la frontera sur y ex embajadora de Estados Unidos en México, dijo que el gobierno le está pidiendo al Congreso 4 mil millones de dólares para ayuda específica a organizaciones comunitarias y sin fines de lucro de Honduras, El Salvador y Guatemala, con el fin de tratar de aliviar algunas de las condiciones que provocan que la gente huya de sus lugares de origen.
En tanto, el gobernador de Texas, Greg Abbott, quien el pasado miércoles puso fin a las restricciones contra el Covid-19, ha intentado que las preocupaciones sobre la propagación del virus se enfoquen en los migrantes enfermos que cruzan la frontera desde México, aunque sin evidencia de que sean un factor significativo.