Ciudad de México. La mejor forma de ayudar a las mujeres tras la crisis que generó la pandemia de Covid-19 es lograr que la economía se recupere, afirmó Ana Botín, presidenta de Banco Santander.

“La mejor manera que tenemos para ayudar a las mujeres, en este caso concreto del coronavirus, es ayudar a que la economía se recupere y para ello, lo más importante, el foco debe de ser en las pequeñas y medianas empresas. Las grandes, por supuesto que también, pero la problemática es muy diferente”, dijo.

Al participar en el panel “Las mujeres en la banca: impacto en la pandemia y visión de futuro”, realizada previo a la inauguración de la 84 Convención Bancaria, Botín, una de las mujeres más poderosas del mundo, consideró que las empresarias emprendedoras son las que se tienen que ayudar más rápido en el actual contexto.

“Uno de los temas que más estamos defendiendo en todos los países, pero especialmente en México, donde tenemos más clientela de pequeñas y medianas empresas, es que el Covid-19 les afecta mucho más de ciertos sectores donde hay más presencia de la mujer, además de que el tener a los hijos en casa hay muchas mujeres que se están saliendo o planean salirse del mundo laboral”, mencionó.

Ana Botín refirió que actualmente, todas aquellas firmas del sector de servicios, turismo y ocio lideradas por mujeres son las que se tienen que apoyar.

“La mejor manera de ayudar a las mujeres es ayudar a esas pequeñas empresas en general, de los sectores más afectados. Ahí tenemos que ser muy productivos y ver de qué manera podemos hacerlo, porque si queremos recuperar rápido, tenemos que mantener vivas a estas empresas que se merecen estar vivas”, sostuvo.

La presidenta de Santander refirió que cuando un empresario cierra la empresa y después abre una nueva, toma mucho más esfuerzo y más tiempo, por lo tanto, “ahí los bancos tenemos un papel fundamental. Hemos sido parte de la solución en esta crisis y queremos seguir siéndolo”.

Por su parte, Galia Borja, subgobernadora del Banco de México (BdeM), puntualizó que las mujeres tienen un espíritu emprendedor fuerte, y en México más de la tercera parte de las micro, pequeñas y medianas empresas son de mujeres.

“Aquí el reto es más de cómo acercarlas a la formalidad. Probablemente hacer más análisis de cuáles son sus necesidades y cómo las resuelven ahora”, expresó.

Enfatizó que del lado financiero se deben reforzar todos los productos de ahorro para el género femenino.

“Probablemente hacen falta más estudios, saber cómo o cuál es la capacidad de adaptarse a los cambios, cómo lo están haciendo ahora, para que entonces ahora el sector formal, la banca, el gobierno se puedan adaptar y encontrar un equilibrio entre la oferta y demanda que puede haber”, sostuvo Borja.