Ciudad de México. No hace mucho tiempo la esposa de Caleb Followill, Lily Aldridge, halló algo en su casa. “Querido, estaba revisando unas cajas y encontré esto”, en las manos llevaba una pila de libros. “Libros de letras –explicó el cantante estadunidense–, algunas de una época anterior a Kings of Leon. Canciones que escribí cuando tenía 16. Pensé que se habían perdido en una mudanza. Fue un gran momento”.
Han pasado casi dos décadas desde que la banda surgió con su Youth and Young Manhood. Kings of Leon aparecía con una formación ideal para los publicistas: tres hijos de un predicador itinerante y un primo, que tocaban una mezcla de rock garage sureño.
Pronto la agrupación se ganó una buena reputación en Europa, aunque en su país natal, Estados Unidos, fue mayormente ignorada hasta la salida de su cuarto disco, Only by the Night. Ahora la banda, una de las más grandes formaciones de rock en el mundo, promueve When You See Yourself.
El álbum fue grabado antes de la pandemia, así que durante varios meses se mantuvo en espera de una fecha de lanzamiento. A pesar del tiempo extra y la tentación, la banda decidió dejar sus canciones como estaban.
“Estoy feliz de que no usáramos el tiempo que teníamos para manipular y mover cosas, porque es algo con lo que no quieres meterte”, explicó Followill a The Independent.
Durante un buen tiempo, el cantante no escuchó su trabajo. Cuando lo hizo, se sorprendió al descubrir que no sólo había letras muy personales, sino también muy premonitorias.
“Una parte es muy profética. Incluso da escalofríos a veces”, expresó.
El tiempo libre ha ayudado a la banda a “tener conversaciones profundas sobre la música. Nunca habíamos podido hacer esto. Así que la camaradería entre nosotros nunca había sido más fuerte. Nos apreciamos mutuamente, y nuestros lazos familiares son incluso más fuertes, porque ahora tenemos hijos, y las relaciones entre ellos son muy importantes para nosotros”.
Su hermano mayor, Nathan, ha disfrutado el tiempo con su familia. “He dado lecciones de batería a mis hijos. Mi esposa y yo habíamos hecho el pacto de no forzar la música en nuestros hijos, pero a un mes de cuarentena mi hija me preguntó: ‘¿Papá, me puedes enseñar a tocar la batería de verdad?’” Su hermano menor siguió su ejemplo, así que mi guarida es ahora un cuarto lleno de baterías y poco silencio. Ahora hasta mi hijo de dos años tiene su set. Así que estamos listos”.
Los Kings of Leon han comentado lo raro que es ser una banda estadunidense en Europa. Así que estar en una época cada vez más desquiciada fue extraordinario para los músicos.
“Lo primero que viene a mi mente es una sensación de alivio”, afirmó Nathan al dar su opinión sobre el cambio de presidente. “No creo que exista una banda en el mundo que elegiría hacer giras y ser de un país donde hay mucho drama, donde sabes que te van a hacer preguntas, y con razón.
Su disco, When You See Yourself reúne a la banda con el productor Markus Dravs, famoso por su trabajo con otras grandes agrupaciones, como son Arcade Fire y Mumford & Sons. Caleb lo describe como una persona exigente. “Cuando una canción empezaba a sentirse cómoda, él les decía: ‘Bien, ahora, tócala como una canción rápida, muy rápido, con mucha intensidad’. Muchas veces al hacerlo, no sólo funcionaba, terminaba convirtiéndose en una canción rápida. Lo mismo con una canción rápida: él decía: ‘Bien, ahora tócala como una balada’. Y ahí nos dábamos cuenta de que esa historia no estaba lo suficientemente desarrollada, no tenía ninguna profundidad, sólo se ocultaba detrás de un beat…”
Calidez del equipo vintage
El disco cuenta con la calidez del equipo vintage que la banda decidió usar. “A veces el equipo es rebelde y no quiere tocar contigo. Así que tienes como que masajearlo y trabajarlo”. El brillo del álbum también yace en los arreglos que hicieron a las canciones. “Creo que todos pusimos nuestros egos al lado con el disco. Encontramos más espacio, más tiempo para dejar que las canciones respiren”.
Los músicos también asumimos papeles distintos. “Matthew estuvo muy atento al trabajo de arte y Jared se involucró más con la escritura de las letras. Es el primer álbum en el que él fue mi persona con quien rebotar las ideas”. En parte también se debe a la maduración de su primo, quien sólo tenía 16 años cuando se formó la banda.
El vocalista también reconoce el aporte del bajista, Jared, sobre la música contemporánea. “Su gusto musical es probablemente superior al de todos nosotros, porque mantiene su dedo en el pulso. También es un chico listo, alguien que te dirá las cosas directamente, y si algo apesta él te lo hace saber”.
Asimismo, ha restado importancia a las críticas sobre su manera de cantar. “Mientras más viejo, menos te importa lo que los demás piensen. Y si la gente cree que estoy sobrecantando no me importa. Cuando eres joven, constantemente miras alrededor, en espera de que a la gente le guste tu música, te importa demasiado lo que los demás piensen de ti”.
Entre los libros de letras también había algunas grabaciones en casete. En ellas, Caleb pudo escuchar “que mi verdera voz quería salir, pero yo era joven, y pensaba que era más cool que la gente no entendiera lo que decía”, señaló riendo. “Pero cuando escucho estos demos, percibo mucha pureza en mi voz, y me doy cuenta de que estuvo ahí todo el tiempo. Es sólo que me tomó mucho tiempo sentirme lo suficientemente cómodo como para mostrarla”.
Hace poco la esposa del vocalista le preguntó si estaba emocionado. “Me dijo: ‘Ustedes de verdad tienen la oportunidad de que el rock dé un paso atrás y sea parte de la conversación’, porque realmente ha caído y otros tipos de música se han vuelto más populares. Pero definitivamente tengo la esperanza de que el rock tenderá otro renacimiento, porque considero que es algo necesario para todos. Creo que es una gran forma de alivio”.