El centro de la transformación del país está en las mujeres. Y es momento de cerrar la brecha de desigualdad que padece la mayoría, establecer mecanismos efectivos ante la violencia de género, alcanzar la igualdad sustantiva y pagar la deuda histórica con ellas, coincidieron integrantes del gabinete federal convocadas ayer por el presidente Andrés Manuel López Obrador y por la Secretaría de Gobernación para hacer balance, en el Día Internacional de la Mujer, de sus acciones de política pública.
Más tarde, en las oficinas de Gobernación, se realizó una mesa de análisis sobre temas de género. Además de funcionarias, también acudieron mujeres con labores destacadas en el deporte, la agricultura y la lucha por la agenda feminista, entre otras.
En Palacio Nacional, Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación; Nadine Gasman, presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), y Fabiola Alanís Sámano, titular de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), admitieron que México es un país con mucha inequidad, pero que hoy el gobierno “se mueve hacia la igualdad” y ha colocado a la mujer en el centro de sus políticas.
La conmemoración del Día Internacional de la Mujer surgió de la lucha en diversos países por obtener derechos y libertades para ellas, evocó Sánchez Cordero. En México –dijo– agrupaciones y congresos feministas también han pugnado por la igualdad y obtenido logros como la aprobación en muchos estados de la interrupción legal del embarazo, la incorporación de requisitos de paridad de género en las leyes electorales y la tipificación del delito de feminicidio.
En el Palacio de Cobián, Argentina Casanova, de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos, dijo que la causa feminista por los derechos de las mujeres es legítima. “Nuestras formas son diversas, como en toda lucha social: marchamos, protestamos, exigimos ser escuchadas frente a los feminicidios, desapariciones, abuso institucional...” Y añadió: “Somos aliadas de quien busca justicia para las niñas y las mujeres”.
En la última década, 63 defensoras de derechos humanos y periodistas fueron asesinadas. Pidió justicia por ellas “y que sea una política del Presidente la lucha por los derechos humanos de las mujeres, contra la corrupción y la impunidad, en la violencia contra ellas. Somos sus aliadas en la construcción de esa política, pero necesitamos ser escuchadas”.
Fabiola Alanís detalló: se han emitido 21 alertas de violencia de género en 18 estados, así como medidas de coordinación para protocolos de atención de las llamadas al 911, así como una Unidad de Contexto en cuatro entidades para analizar las circunstancias en las que se dio el delito. Hay mucho por hacer en los estados –admitió–, pues de las 425 medidas recomendadas, solamente 10 por ciento se han cumplido en su totalidad.
Por su parte, Nadine Gasman refirió: “Somos un gobierno que escucha la protesta de las mujeres en las calles y nos duele e indignan los feminicidios. Desde el gobierno de México sabemos que es una de nuestras mayores deudas”.
