Vecinos denunciaron la construcción de dos torres de departamentos de 11 y 20 pisos en avenida Nuevo León número 112, que violan los niveles permitidos en el programa parcial de desarrollo de la colonia Hipódromo, que marca un máximo de ocho.

Tras exigir a la alcaldía Cuauhtémoc clausurar la panadería Lecaroz ubicada en la calle Tamaulipas 112, cuyo funcionamiento “no está permitido en la zona”, señalaron que la constructora colocó una manta con “una presunta autorización ambiental”.

Con ello, expusieron, continúan con la obra, cuya licencia de demolición fue del 29 de julio al 29 de octubre de 2019, pero la iniciaron el 14 de diciembre, lo cual se informó a la alcaldía dos días después sin que interviniera ante esta irregularidad.

Adolfo Estrella explicó que los trabajos concluyeron en marzo del año pasado y después apareció una manta con datos de una licencia de construcción tipo C, con vigencia del 27 de agosto al 22 de agosto de 2022, y otra informando de la edificación de dichas torres.

Información de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda y del programa de desarrollo urbano establece que sólo están autorizados un máximo de ocho niveles y “no procede la transferencia de potencialidades, aun cuando el predio tiene salida por la calle Culiacán 79”, explicó.

Comentó que tampoco encontraron en la alcaldía que se haya tramitado un certificado único de zonificación de uso de suelo desde 2016 para ese predio, donde había un edificio de oficinas y un estacionamiento cubierto, ni la licencia de construcción.

La posible transferencia de potencialidades en esos predios, precisó, presenta limitantes, pues en el programa se indica que sólo es para aquellos con uso de suelo habitacional, y en Nuevo León es habitacional mixto y en Culiacán habitacional con comercio.

La obra que ejecuta IFC Cimentaciones Especiales, de acuerdo con la manta colocada, es “irregular y exigimos a las autoridades la clausuren. Advirtieron que de no hacerlo “tomaremos las calles y lo mismo sucederá por el caso de la panadería”, coincidió con Connie Guevara.

La vecina, cuyo departamento colinda con el establecimiento, denunció que desde 2016 han “luchado por su cierre, pues viola el programa de desarrollo al no ser habitacional mixto, sino que es un negocio que ha generado daños al edificio donde vive al no contar con barda”.

Además, es incesante el ruido que “generan sus máquinas a todas horas, y el uso de un elevador de autos, lo cual no ha sido atendido por el alcalde Néstor Núñez, pese a las reiteradas solicitudes de intervención, por lo que impera la impunidad”.

Por otra parte, Sonia García denunció que la constructora de Cuidados para la Gente SA de CV, en la calle de Ensenada, ha hecho caso omiso de reparar su barda, con el riesgo de que “se venga abajo por su construcción. La alcaldía dijo que no puede hacer nada”.