La Fiscalía General de Michoacán detuvo a Hanna Suárez por ocultar pruebas en el feminicidio de la educadora Jessica González Villaseñor, perpetrado por su novio Diego Urick Melgoza, en septiembre pasado. Debido a la inconformidad social y mediática el caso tuvo resonancia.
Luego de un cateo de las autoridades se descubrió que Hanna Suárez tenía en su domicilio un hacha y una chamarra del homicida que ocultó durante meses en su domicilio. La joven declaró que fue obligada por el presunto homicida, que pertenece a una familia de poder político en Michoacán.
Jessica despareció el 21 de septiembre, horas después de haber salido de su domicilio ubicado en la ciudad de Morelia. Su cuerpo fue encontrado el 25 de septiembre en una zona boscosa del fraccionamiento Monarca y tras la necropsia se supo que había recibido un fuerte golpe en la cabeza.
Diego fue la última persona que la vio con vida. Y el mismo día de su desaparición huyó de su domicilio y mandó lavar su vehículo.
Desde la desaparición de la joven educadora hubo una enorme actividad en redes sociales que promovieron familiares y amigos. Incluso el pasado 1º de febrero, junto con activistas colocaron unos 300 pares de zapatos frente al palacio de gobierno de la capital michoacana para demandar justicia a las autoridades, cuando estaba por celebrarse la primera audiencia de control, debido a la desconfianza, porque Diego pertenece a una familia influyente.
En los últimos cuatro meses de 2020, 12 mujeres desaparecieron y después las localizaron muertas. Del total de homicidios cometido después de 2016, sólo 10 por ciento, en promedio, han sido catalogados como feminicidios.
El 28 de junio de 2016, la Secretaría de Gobernación activó la alerta de violencia de género contra las mujeres en los 14 municipios con mayor número de habitantes en esta entidad; sin embargo, contrario a lo esperado los homicidios aumentaron de manera significativa.
En 2016 y 2017 fueron ultimadas 138 y 139 mujeres, respectivamente; en 2018 la cifra alcanzó 156 asesinatos y en 2019 mataron a 180. Es decir, 68 víctimas más entre 2016 y 2020. En los dos primeros meses de este 2021 han sido ultimadas 45 personas del sexo femenino.
La vinculan a proceso por matar a su niña
En el mismo contexto, en Jalisco, Rosa Isela N, madre de la niña de cinco años que fue encontrada sin vida a finales de diciembre en un lote baldío, amordazada, con huellas de violencia y envuelta en bolsas de plástico, fue vinculada a proceso acusada de ser quien mató a la menor, en un caso por el que había sido detenido el padrastro, quien quedó absuelto.
En un inicio se detuvo a la pareja de la mujer como el principal sospechoso tras el hallazgo de la niña en la colonia Lomas del Aeropuerto, el 23 de diciembre, en el municipio de El Salto, pero se comprobó que la menor, que tenía ya un mes de haber muerto, sufría abusos y violencia de su propia progenitora, quien fue vinculada por el delito de feminicidio y se le impuso una prisión preventiva oficiosa durante un año como medida cautelar, en tanto terminan las investigaciones.