Asunción. La policía reprimió ayer a personas que protestaban en la capital paraguaya por la crisis en los hospitales, en medio de un aumento récord de casos de Covid-19 que dejó el sistema sanitario al borde del colapso y forzó la renuncia del ministro de Salud, Julio Mazzoleni.
Los agentes dispararon balas de goma y utilizaron gases contra quienes se manifestaban en los alrededores de la sede del Congreso, mientras intentaban dispersarlos con carros lanzagua. Los inconformes derribaron barreras de seguridad y arrojaron piedras a los policías. No se reportaron heridos ni detenidos.
“Hemos acordado juntos que yo deje el cargo del Ministerio de Salud Pública a los efectos que se pueda generar esa paz que necesitamos para poder enfrentar este desafío”, señaló Mazzoleni.
Más de 3 mil muertes por el virus
El presidente, Mario Abdo, designó como ministro interino al médico Julio Borba, quien lideraba uno de los viceministerios de la cartera sanitaria. “Mi prioridad hoy es tener medicamentos e insumos en tiempo y forma”, indicó el funcionario a periodistas. “Estamos viendo todas las opciones válidas.”
Paraguay transita por lo que Mazzoleni describió como “la peor parte de la pandemia”, con récord diarios de contagios que han presionado su frágil sistema de salud. El Ministerio registró hasta el jueves 164 mil 310 casos y 3 mil 256 muertes asociadas al coronavirus.