Las comisiones unidas de Salud y de Justicia de la Cámara de Diputados aprobarán el lunes el dictamen para autorizar el uso lúdico de la mariguana y el proyecto de ley federal para la regulación del cannabis que confirma “el derecho de las personas mayores de 18 años al consumo, como parte del derecho al libre desarrollo de la personalidad, el cual deberá realizarse sin afectar a terceros”.
De esta manera, el dictamen se turnará a la Mesa Directiva para discutirlo el martes en el pleno y, aunque se avale la minuta del Senado, será con cambios porque “al abrir el mercado legal del cannabis, sustancia considerada como estupefaciente en tratados internacionales, es indispensable que la ley tenga un claro y definido enfoque de salud pública”. Así, la minuta sería devuelta al Senado.
La convocatoria a la sesión del lunes en comisiones se tomó con los votos de Morena y sus aliados, con el voto en contra de la oposición. El diputado Manuel Huerta (PT), secretario de la Comisión de Salud, expresó que se rechazó la propuesta de otros partidos para convocar a más foros abiertos y ponderó que es el mejor momento de regular el consumo de mariguana.
En contraste, la diputada Martha Tagle (MC), integrante de la comisión, expresó que la mayoría legislativa no dio espacio para abrir una discusión seria de las modificaciones que se presentan a la minuta del Senado.
Además se mantiene la imposición de permisos para el cultivo privado, lo cual implica una injerencia indebida en el ámbito personal, así como el límite de seis plantas en un mismo domicilio –y hasta ocho si en la misma vivienda habitan más de dos–, que es insuficiente para el autoconsumo, consideró.
Resaltó que se insiste en calificar el uso como lúdico o recreativo, “lo que genera estigma, pues la definición debería ser ‘uso privado adulto’, o bien, como lo han propuesto las organizaciones, ‘uso personal responsable’”.
Sobre la producción
El proyecto prevé que la producción de mariguana y sus derivados tendría los siguientes fines: el auto- consumo, ya sea en casa habitación o en asociaciones de cannabis; la producción para la comercialización y venta con fines lúdicos; la producción con fines de investigación, y finalmente la producción de cáñamo para fines industriales.
Para producir mariguana se tendría que obtener un permiso del Consejo Nacional Contra las Adicciones, que los otorgaría con vigencia de un año. Cada persona o asociación deberá presentar una solicitud y, si en un lapso de tres meses, no hay respuesta del consejo, se entenderá que fue rechazada.
Respecto del derecho al consumo, las comisiones prevén agregar una restricción genérica de consumo en escuelas públicas y privadas, así como en los lugares donde actualmente se prohíbe fumar tabaco, con objeto de garantizar la salud de los no consumidores, sin establecer restricciones al derecho al libre desarrollo de la personalidad.
Asimismo, se considera regular la producción para uso lúdico, la cual contempla en primer lugar la producción en casa habitación y la producción en asociaciones de cannabis.