El banco inglés HSBC ve en México un país sólido y bien administrado, “que va en una dirección adecuada”. Jorge Arce, director general de la institución, plantea la necesidad de generar condiciones para aumentar la inversión pública y la del sector privado, que por ahora no se ha reflejado en grandes proyectos.
“Tenemos una confianza absoluta en México, hay cosas muy positivas, otras en las que no vamos a estar de acuerdo o pensamos que hay otras soluciones. Pero en general el país va en la dirección adecuada, es una nación sólida y bien administrada”, sostuvo en entrevista con La Jornada, a propósito de la 84 Convención Bancaria, que tendrá lugar la próxima semana.
De la relación con el gobierno federal reconoce que “siempre nos ha escuchado, hemos tenidos las puertas abiertas”. Sostiene: “son la autoridad, muchas veces nos van a decir que no, para eso los eligió el pueblo. Pero siempre nos van a escuchar, siempre tratarán de entender nuestro punto de vista; a veces vamos a coincidir y a veces no. Pero la mayoría de las veces coincidimos”.
El banquero detalló que al inicio de la actual administración había una lista de grandes proyectos en el sector energético, sobre todo de electricidad, mismos que no se concretarán en el corto plazo.
Arce consideró que si bien en 2020 la economía cayó 8.3 por ciento, el país mostró ser más resistente a lo esperado y evitó una crisis “catastrófica”. Indicó que, pese a todo, hay una gran confianza por parte de la iniciativa privada en el país, dado que hay una mejor prospectiva para el avance de la economía este año, y califica de positiva la relación con el gobierno, aunque hace falta claridad en ciertos sectores y promover la inversión en todos sus sentidos.
Agregó que el México de los comerciantes, restauranteros, empresas de turismo, entre otros, es el que más sufre por la crisis y, como nación, es necesario encontrar la solución a este problema.
–¿Hay confianza en México?
–Sin duda alguna hay confianza en México y en los mexicanos. El país ofrece una oportunidad única para cualquier inversionista. Sin embargo, hay cosas que tenemos que trabajar y remediar; la primera, la gran preocupación que tenemos todos, es cómo vamos a salir de la pandemia.
“La única manera viable de salir de esta situación es volver a abrir la economía.
“Sí, hay cuestionamientos en varias leyes, en varias industrias; sin embargo, México ofrece un lugar único, ofrece población joven, un tratado de libre comercio sin igual con la principal economía del mundo, finanzas públicas sanas. El país ofrece una oportunidad única y la gente vemos que sigue invirtiendo.”
–¿Ven una recuperación tras la crisis?
–Seguramente habrá una recuperación económica del país, especialmente si la comparamos con lo que pasó el año pasado, de una caída superior a 8 por ciento. Este año vamos a crecer, lo más probable, entre 3 y 4 por ciento.
–¿Por qué la inversión no fluye, qué es lo que pasa?
–Necesitamos inversión privada, extranjera y del sector público. La parte de inversión nos preocupa porque no vemos mucho interés en invertir en grandes proyectos en México.
“Si vemos cuál era la lista de grandes proyectos, en cuál sector se iba a invertir al inicio del sexenio, muchos de ellos tenían que ver con la parte de energía, muchos de ellos con la generación y el transporte de electricidad y esos no se están viendo ni se verán en el corto plazo, entonces tenemos que ver cómo facilitamos el campo propicio para que se hagan inversiones en todos los sectores.
“Sí vemos gente que invierte en sus fábricas, que se están abriendo parques industriales, que se siguen construyendo hoteles, pero necesitamos ampliar el espectro en donde la gente y los gobiernos locales y federales, inversionistas extranjeros puedan invertir.”
–A dos años del inicio del gobierno de AMLO ¿cómo es la relación con la administración?
–La administración ha hecho muchas cosas positivas, inclusive antes de entrar, apoyó la firma del T-MEC, mantuvo finanzas públicas sanas y las sigue manteniendo, hizo la aprobación a la Ley de Pensiones, la cual permitirá que muchos mexicanos en el tiempo se puedan retirar con niveles más cómodos de ingresos y de ahorros y se utilizarán en invertir en México, esa ley es transformacional, el T-MEC también.
“¿Qué me gustaría? Más claridad en ciertos sectores, en promover la inversión pública, privada y extranjera para llegar a niveles altos para que México crezca a los niveles que necesita y merece.”
–¿Qué demostró la caída de la actividad económica en la crisis?
–La crisis demostró que México es un país muy resistente, más de lo que nos imaginábamos todos. Había proyecciones más catastróficas de lo que realmente resintió la economía y esto se debe a que hemos construido a un país, en especial en los pasados 25 años, que es abierto.
–¿Qué pasa en el México real, las pequeñas empresas, el mexicano de a pie?
–Todos, en general, en México estamos sufriendo, pero el mexicano real, el del changarro, el restaurantito, el que vivía de propinas, de valet parking, de bares, gimnasios, turismo, ellos están sufriendo más que otros, porque muy difícilmente tendrán los recursos una vez que se abra la economía para recuperar lo que venían haciendo antes.