Barcelona. El Barcelona liberó parte de la presión que lo asfixia en fechas recientes, al borrar una desventaja, obligar a la prórroga, y vencer 3-0 al Sevilla ayer para avanzar a la final de la Copa del Rey por séptima ocasión consecutiva.
Ousmane Dembélé abrió el marcador (12), Piqué puso el 2-2 en el descuento para llevar el partido a la prórroga (90+4) y allí Martin Braithwaite marcó de cabeza el 3-0 (95), que dio al Barça el pase a su novena final en 11 temporadas.
La escuadra catalana tiró del orgullo para remontar la eliminatoria ante un Sevilla que jugó con 10 hombres toda la prórroga ante la expulsión de Fernando, por doble amonestación (90+2).
El rey de Copas pugnará por su trofeo 31 en este certamen el próximo 13 de abril en el estadio de la Cartuja de Sevilla frente al vencedor del duelo que disputarán este jueves el Athletic de Bilbao y el Levante (1-1 en la ida).
Esta victoria supone una inyección de moral a los azulgranas en una semana convulsa en lo institucional y manda un aviso al PSG, equipo al que enfrentará el miércoles en la vuelta de los octavos de final de la Champions con la misión de revertir el 4-1 de la ida.
Los catalanes, alentados por su triunfo liguero contra el Sevilla 2-0 del sábado, salieron al campo dispuestos a manejar el partido ante un equipo andaluz que se presionó desde el inicio.
Sergio Busquets avisó con un disparo desde la frontal que detuvo el arquero Tomas Vaclick (10) y apenas dos minutos después, Dembélé soltó un tiro que se coló por la escuadra derecha.
El extremo francés, quien lleva ocho goles, fue uno de los más desequilibrantes de su equipo, junto a su capitán Lio Messi, que como es habitual, fue el catalizador del juego ofensivo azulgrana.
Los andaluces crecieron tras la pausa y tuvieron su mejor ocasión cuando Mingueza derribó a Lucas Ocampos en el área. El argentino tiró la pena máxima pero Ter Stegen atajó el balón.
El Barcelona se lanzó al acecho y en el último minuto del descuento, Piqué se elevó para rematar de cabeza un centro de Griezmann al área y marcar el tanto que les daba esperanza. El gol mandó el duelo a la prórroga, donde el Barça volvió a aumentar su cuenta con una cabezazo en plancha de Braithwaite.
Ronald Koeman, técnico del Barcelona, dijo estar orgulloso de los azulgrana. “El equipo lo merece. Ha mejorado mucho, es un resultado importante, si ganas eres muy bueno y si pierdes eres muy malo”.
En tanto, Julen Lopetegui, timonel del Sevilla, se mostró decepcionado al lamentar que “nos toca tragar veneno”.