Zacatecas, Zac. Familiares del joven Esteban Ricardo Aguilar Hernández, de 22 años, quien murió baleado presuntamente en un accidente, mientras convivía con tres policías estatales en junio del año pasado –quienes aparentemente eran sus amigos-, solicitaron su intervención a Arturo López Bazán, titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Zacatecas (SSPZ), así como al gobernador Alejandro Tello Cristerna, para que se investigue el caso y se haga justicia.
En una carta entregada a este medio, familiares de Esteban Ricardo Aguilar Hernández, narraron que la noche del 20 de junio de 2020, el joven se encontraba a bordo de un auto compacto, junto con los policías estatales en activo: Arturo Rodríguez, Francisco Javier Herrera y Fernando Díaz Serna, a quienes conocía y se presume eran sus amigos.
Los cuatro habían estado conviviendo en un parador turístico de la capital de Zacatecas, aparentemente consumiendo bebidas embriagantes, cuando a uno de los policías –se ignora quién de los tres-, se le disparó su arma de cargo, hiriendo mortalmente a Esteban Ricardo.
De acuerdo con los familiares de la víctima, los tres policías “en un principio trataron de ocultar los hechos, ya que con mentiras nos decían a la familia que habían sido víctimas de un ataque, cuando fueron ellos mismos quienes le dispararon”.
Cuando ocurrió aquel incidente, trascendió en la nota roja de varios medios de comunicación locales, que tres individuos no identificados (ahora se sabe que eran policías estatales activos, vestidos de civil), habían llegado a bordo de un automóvil y dejaron abandonado afuera del Hospital General de Zacatecas, sobre la banqueta, a un hombre baleado, agonizante. Huyendo enseguida ellos del lugar.
Se trataba de Esteban Ricardo, quien fue atendido por personal de dicho nosocomio y falleció aquella misma noche, por la lesión de arma de fuego que presentaba.
Los familiares del joven acudieron a interponer la denuncia respectiva –que de oficio debió ser investigada por tratarse de un homicidio doloso-, ante la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas, pero hasta ahora, ocho meses después de los hechos, no hay justicia:
“Hasta la fecha sigue impune el homicidio de nuestro hijo y hermano, ya que por diversas circunstancias, no se ha podido esclarecer su muerte, y los responsables siguen libres, sin haber sido juzgados”.
Cuando ocurrieron los hechos, el titular de la SSPZ era Ismael Camberos Hernández (quien supuestamente protegió a los agentes), quien fue relevado posteriormente, en el mes de septiembre del año pasado, por Arturo López Bazán, en quien los familiares del joven asesinado, tienen confianza y piden su intervención, para que se ponga a disposición de la Fiscalía del estado, a los tres policías que tienen identificados, y son los presuntos responsables del homicidio.