Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que, con su más reciente reporte, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y sus directivos cayeron en el ridículo, en la autodestrucción, porque todo el documento –correspondiente a la fiscalización de la cuenta pública de 2019– está plagado de errores.
“Por el bien del país es importante que se investigue y que se limpie si es necesario, que sí lo es, porque esto que hicieron pone hasta en ridículo a esa institución, a los responsables de esa institución. Entonces, tiene que haber algo, pero que sea la Cámara de Diputados (la que investigue el trabajo de la ASF)”, advirtió.
Adelantó que se reunirá con su gabinete para analizar a detalle el informe, aunque resaltó la gravedad de que una instancia como la ASF haya asegurado que el costo de no construir el aeropuerto de Texcoco ascendía a 331 mil 991 millones de pesos cuando en realidad la cifra fue de 110 mil 807 millones.
Consideró que el organismo se enfocó en ese tema en respuesta a los grupos interesados en la continuidad de esa “transa, atraco” que sería la terminal de Texcoco.
Por ello, remarcó, la Cámara de Diputados debe tomar su tiempo en la indagatoria, revisar el trabajo de cada responsable en el organismo, porque no se trata de quitar un funcionario, como parte del resolutivo, y con ello decir que ya cumplió con su responsabilidad, sino de fortalecer a las instituciones “para que sean creíbles”.
En la conferencia de prensa matutina de ayer, el mandatario reiteró que el informe de la ASF fue elaborado de mala fe, con intencionalidad política para golpear a su gobierno y, por tanto, significó un festín para sus opositores, a fin de ir generando la idea que su administración es igual a las anteriores.
En ese contexto presentó un video, elaborado por su equipo de comunicación social, con algunos extractos del contenido en medios de comunicación –electrónicos y escritos– cuando desde el sábado anterior dieron la noticia del hallazgo de la ASF.
“¿Cómo lo ven? Esto es lo que enfrentamos todos los días, porque todos están al servicio del régimen de corrupción que imperaba y quieren regresar por sus fueros”, dijo después de la transmisión del recuento.
Ahora (los comunicadores y analistas) “van a decir que es culpa de la Auditoría, pero estaban esperando ¿qué?, ¿no pudieron constatar, revisar la información?”, reprochó, y luego pidió a los directivos de los medios de comunicación “poner por delante la ética” y no manipular.
Al inicio de su exposición dijo que aunque la ASF aceptó el error, “pues sí causan daño y dan elementos a nuestros adversarios, a la oposición conservadora, a los que quieren mantener el régimen de corrupción que imperaba desde antes de que llegáramos al gobierno, el régimen de corrupción que predominó en los últimos 36 años”.
Señaló que en el episodio en cuestión estuvieron atacando a su gobierno de manera especial tres, cuatro, cinco días.
Incluso mencionó que el “linchamiento” de la prensa hacia Madero fue crucial para el golpe de Estado de 1913. “Ellos (los periodistas del régimen) abonaron el terreno para eso”.
Ahora, dijo, creyeron que nosotros nos íbamos a quedar callados y que el pueblo se iba a tragar todas esas mentiras.