Ciudad de México. El pleno del Senado dio entrada ayer a la minuta con la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica, en medio de un fuerte debate entre Morena y la oposición, que insistía en que fuera turnada a seis comisiones dictaminadoras, lo que fue rechazado por legisladores del grupo mayoritario, quienes lo consideraron un intento por retrasar su aprobación.

Aunque se trataba de un mero trámite, el tema se discutió durante más de una hora, entre reclamos de senadores de PAN, PRI y MC, que aprovecharon para demandar que la minuta remitida por la Cámara de Diputados sea analizada en parlamento abierto y manifestarse contra la iniciativa preferente del presidente Andrés Manuel López Obrador; sostuvieron que tendrá un fuerte impacto ambiental, al frenar las energías limpias, y repercusiones negativas en el T-MEC.

El senador Napoleón Gómez Urrutia (Morena) respondió que es una reforma que busca la soberanía energética, y que según su experiencia, los parlamentos abiertos en esta legislatura sólo han servido para frenar iniciativas fundamentales para el país.

Y ante la insistencia de los opositores de que se les permita discutir la minuta con expertos y empresarios involucrados, como planteó la priísta Claudia Ruiz Massieu, Malú Micher (Morena) respondió: “qué raro que ahora sí quiere escuchar a todo mundo, cuando en años pasados no oyeron a nadie, sólo a los intereses económicos, a esos que ahora quieren traer a esta Cámara”.

Igualmente, su compañero de bancada, José Narro, recordó a priístas y panistas que la reforma energética de Peña Nieto pasó por encima del Congreso, ya que se hicieron sesiones secretas, “se dieron madruguetes para traicionar al pueblo de México”, en un recinto cercado por la fuerza pública.

Expuso asimismo que Morena no está contra las energías limpias, pero “es claro que mientras se hace la transición también requerimos de las energías fósiles” y fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). También de Morena, Lucía Trasviña consideró que se debe juzgar “por traición a la patria” a quienes permitieron el gran negocio de las empresas privadas que generan energía a costa del erario.

Al inicio del debate, el presidente de la mesa directiva, Eduardo Ramírez, había planteado que se turnara a las comisiones de Energía y de Estudios Legislativos Segunda, pero los presidentes de las de Economía, Gustavo Madero (PAN), y de Medio Ambiente, Raúl Bolaños (PVEM), insistieron en que también debían ser parte de las dictaminadoras. Otros legisladores de oposición se sumaron al reclamo y desde el PAN se planteó que también las comisiones de Derechos Humanos y de Salud participen en la dictaminación de la minuta. Se turnó a Energía, Estudios Legislativos y Medio Ambiente.