Ciudad de México. La pandemia de Covid-19 está sacudiendo a las familias, y aunque muchas saldrán fortalecidas, otras no lo lograrán, consideró Juan Louvier Calderón, catedrático investigador del Departamento de Humanidades de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Añadió que la actual pandemia pone a la familia en una “disyuntiva a la cual no podemos ser ajenos, la familia se fortalece o se sigue debilitando”.
“Creo que veníamos en una dinámica de debilitamiento de la familia y que la pandemia ha venido a sacudir, ha sido una sacudida muy enérgica de la cual, por la misma nobleza de la naturaleza humana, van a salir fortalecidas muchas familias, aunque en el camino haya algunas familias que no lo superen”.
En el 16 Encuentro de Centros de Cultura, que hoy concluye, organizado por el Consejo Pontificio de la Cultura, la UPAEP y la Organización de Universidades Católicas de América Latina y el Caribe (Oducal), el también profesor del International Institute for Culture, de Filadelfia, indicó que aunque el coronavirus ha impuesto retos y generado problemas de diversa índole, también, tiene una “faceta positiva” en lo que se refiere a reforzar lazos de solidaridad familiares.
Resaltó que “el ser humano no podría sobrevivir sino fuese por la solidaridad y subsidiariedad que dan los padres a los hijos, y cuando las condiciones son adversas, es cuando los lazos se fortalecen, pero no se puede dejar de lado que también hay riesgos, como el egoísmo, que puede hacer más complicada la situación de la pandemia”.
Andrés Barba Vargas, secretario general de la ODUCAL, destacó que “la familia es el reducto de la sociedad de primera mano, es el lugar en donde la persona se refugia si pierde el empleo, en donde uno se refugia si se siente desconsolado y abrumado por la situación de la pandemia de la Covid- 19.
“La familia es el lugar en donde la persona se protege si las condiciones de salud no le favorecen; la familia es la que sale a poner el hombro por la persona o miembro de la familia que está en un momento de vulnerabilidad.
En el encuentro Vocación al amor y la utopía de lo neutro, que se realiza del 23 al 25 de febrero, Louvier Calderón indicó que la familia debe ser reconocida como la célula fundamental de la sociedad. “Si la familia está sana, la sociedad es sana, pero si la familia se enferma, es un cáncer”.
Barba Vargas destacó que en estos momentos es importante observar la realidad que nos toca vivir, analizarla y reflexionarla e invitar a las personas a tomar una postura con respecto a esa realidad que se está presentando.
En la primera jornada del encuentro, José Manuel Madrazo Cabo, presidente del Comité Organizador del 16 Encuentro de Centros de Cultura y Decano de Ciencias Médicas de la UPAEP, sostuvo que la familia es el lugar idóneo para que los jóvenes crezcan, se desarrollen y formen, además de contribuir para que las sociedades tengan las condiciones necesarias para crecer y generar ambientes apropiados para las personas.
Manifestó que los maestros universitarios se dan cuenta de cuál es el sentir de los jóvenes en la actualidad con respecto al concepto de familia y de su interés por formar una o no; por lo que es importante contribuir a la formación de ellos y ayudarlos a dejar en claro qué es lo que buscan en la vida y las implicaciones que esto conlleva.
Advirtió que muchas de las disrupciones que se presentan al interior de la familia se debe muchas veces a la falta de formación en los jóvenes. “Porque no basta con tener solo valores de respeto, de responsabilidad, sino también tener una visión clara de lo que implica el matrimonio, de lo que implica la familia, para saber realmente si existe un llamado para querer formar una y conocer las responsabilidades que se deben asumir y que es trascendental para la vida de cualquier persona”.
Por lo tanto, dijo que uno de los elementos primordiales es la formación y esta se adquiere en la escuela, desde la niñez y hasta la vida universitaria, con la orientación de los padres, ir desarrollándose en el respeto e ir creciendo en las diferentes etapas de la vida, representan una escuela de preparación para el porvenir en la vida futura de la familia.