Tiflis. Varios miles de simpatizantes de la oposición salieron a la calle este martes en Georgia tras la detención de una de sus figuras, una medida que podría agravar la crisis política que vive este país del Cáucaso desde las elecciones legislativas del año pasado.
Los manifestantes se dieron cita ante la sede del gobierno en la capital Tiflis para protestar por el arresto de Nika Melia, jefe del principal partido de oposición de Georgia, el Movimiento Nacional Unido (MNU), y exigir elecciones anticipadas, según un corresponsal de la AFP en el lugar.
Melia fue sacado por la policía del local de su partido el martes por la mañana y colocado en detención preventiva, según imágenes de la televisión Mtavari.
Cientos de policías antidisturbios utilizaron luego gases lacrimógenos contra sus partidarios y dirigentes de todos los partidos opositores que acampaban frente al edificio desde el miércoles pasado. Decenas de opositores fueron detenidos.
El operativo policial se produjo días después de la renuncia del primer ministro Guiorgui Gajaria el jueves pasado. Gajaria explicó su decisión diciendo que había un desacuerdo en su partido sobre la aplicación de la decisión judicial de detener a Melia.
El accionar policial provocó la indignación de la oposición y las advertencias de los aliados occidentales de esta exrepública soviética.
El jefe del partido Lelo, Mamuka Khazaradzé, opuesto al gobierno, llamó a un "combate pacífico e incansable para defender la democracia georgiana".
"La liberación de los prisioneros políticos y elecciones anticipadas representan la única salida posible a la crisis", afirmó ante la prensa.
Uno de los dirigentes del MNU, Giorgi Pataraia, dijo a la AFP que la policía había "robado servidores informáticos" en el interior de la sede del partido.
En un comunicado, el ministerio georgiano del Interior replicó que la policía había hecho un "uso de la fuerza proporcionado, así como de "medios especiales" en esta operación.
"Conmocionado por las escenas en la sede de MNU esta mañana", escribió el embajador británico Mark Clayton en Twitter.
"La violencia y el caos en Tiflis es lo último que necesita Georgia en este momento. Exhorto a todas las partes a actuar con moderación, ahora y en los próximos días", agregó.
La embajada estadunidense declaró en un comunicado estar "profundamente preocupada" por la detención de Nika Melia.
"La fuerza y la agresividad no son la solución pata resolver las diferencias políticas en Georgia", dijo la embajada.
El emisario de la Unión Europea, Carl Hartzell, lamentó de su lado que "se imponga la lógica de una escalada".