Buenos Aires. El presidente Alberto Fernández viaja este lunes a México, invitado por su par mexicano, Andrés Manuel López Obrador con el que mantendrá reuniones bilaterales, en un momento difícil por las consecuencias de la pandemia de Covid-19 y algunos sucesos en la región, en la que ambos gobiernos integran el Grupo de Puebla.
Desde México el embajador argentino, Carlos Tomada, dijo a Télam que el viaje “tiene una impronta de lanzamiento para profundizar las relaciones entre ambos países”. El diplomático sostuvo que durante esta visita “estará muy presente el tema del proceso latinoamericano, la región y el nuevo rol de México”.
En las últimas horas se vivió una situación delicada luego que el mandatario exigió la renuncia al respetado ministro de Salud. Ginés Gonzáles García, quien trabajó activamente para afrontar la epidemia, reorganizando en medio de grandes dificultades el sector de salud, que encontró prácticamente abandonado después de cuatro años de gobierno de la derechista alianza Cambiemos.
“Le exigí la renuncia con dolor. Ginés (González García) era un gran ministro. Y además lo quiero. Pero lo que hizo es imperdonable. La política es ética, tenemos que terminar con este tipo de prácticas, con la cultura argentina de la viveza, la picardía, el manejo de las influencias”, dijo Fernández a Página/12.
El pasado viernes, el periodista y escritor Horacio Verbitsky, de 79 años, dijo en un programa de radio que consultó al ministro donde podía vacunarse, indicándole el Hospital Posadas, pero luego un secretario lo llamó para decirle que un equipo de ese hospital estaría en el Ministerio, donde se vacunaron después de consultar a los equipos médicos, dos personas de larga trayectoria política, ambos mayores que tenían riesgos sanitarios: el senador Jorge Taiana y el diputado y Eduardo Valdés, por consejos médicos de último momento ya que debían viajar a México.
A su vez, el periodista hizo referencia a la posición negativa del jefe de gobierno de esta ciudad Horacio Rodríguez Larreta, de la alianza Cambiemos, de atrasar la aplicación de la vacuna, debido al “negacionismo” de su espacio político, tanto a la existencia del coronavirus como contra la vacuna Sputnik V, sobre la que se realizó junto a los medios de comunicación afines, una campaña desmedida en contra de su aplicación. Incluso la ex diputada Elisa Carrió acusó al presidente Fernández de intentar “un envenenamiento masivo” de la población al comenzar la aplicación de la vacuna rusa.
Cuando Verbitsky relató que fue vacunado en el Ministerio de Salud, se creó una situación grave para el gobierno, y el presidente no dudó en pedir la renuncia del Ministro y suspendió el viaje de Taiana y Valdés-
Por su parte, Verbistky, muy criticado, escribió una carta pública que se conoció hoy para explicar, dice a sus compañeros de trabajo en la Página web "El Cohete a la Luna" y a quienes "siguen mi trabajo y mi militancia desde hace mucho tiempo. Mi vacunación en el Ministerio de Salud fue un error grave, del que me arrepiento, y por el que pido disculpas. Asumo sin excusas la parte que me toca y acepto todas las críticas recibidas, así como agradezco las tan numerosas comunicaciones de solidaridad y afecto. Si lo hice (…) es porque no advertí que fuera algo incorrecto, el ejercicio de un privilegio.
“Entiendo el pedido de renuncia que le formuló Alberto, deploro su salida del gobierno y recomiendo leer su carta de despedida, donde además de trazar un balance de su gestión, luego del desastre de los cuatro años del neoliberalismo, el ex ministro dice que las personas vacunadas en el Ministerio pertenecen a los grupos incluidos dentro de la población objetivo de la campaña vigente(…) Es lo mismo que me dijo cuando, alarmado ante el noveno contagio en mi familia, que abarcó desde septuagenarios hasta bebés de un año, y con una víctima fatal luego de semanas de sufrimiento, lo consulté sobre si me correspondía”, y así lo entendió el ministro.
Allí relata las circunstancias y señala que “amigos bien intencionados me sugieren respuestas polémicas sobre los privilegiados que denuncian privilegios, la pésima gestión de la Ciudad Autónoma frente a la pandemia y la vacunación, donde no hay un cronograma y se abren las escuelas sin las condiciones mínimas(…) Todo eso es cierto y mi ex, que tiene más de 70 y es médica, nunca consiguió registrarse ni en los teléfonos ni en la web de la CABA(…) Pero nada de eso me justifica. Por el contrario", sostiene.
Una versión señala que un gerente de Clarín le pidió al ministro una vacuna, aunque no la Sputnik V, sino la AstaZeneca. y al parecer pensaban tenderle una trampa. En estos momentos el gobierno informó que llega en la próxima semana otro millón de vacunas desde China, con lo cual sumarían más de dos millones ya en el país.