Oaxaca, Oax., Autoridades agrarias y comunales del municipio de Tezoatlán de Segura y Luna, en la región de la Mixteca, expulsaron a miembros de una familia con la intención de despojarlos de sus propiedades, además de retenerlos por 24 horas.
Silvia Vásquez Bautista, quien fue víctima de secuestro y amenazas de que iba a ser quemada viva, explicó que en julio pasado, el comisariado de bienes comunales Gerardo Bolaños Vázquez, rentó unos predios contiguos a los de su padre, Emiliano Luis Vásquez, para pastoreo en la agencia municipal de San Andrés Yutatio, sin embargo, unos chivos se saltaron a su propiedad y ocasionaron daños, tras lo que se acordó resarcir la afectación.
Señaló que al perecer todo se había arreglado, pero en septiembre su papá fue citado por la autoridad, por lo que acudió acompañado por su hijo, pero ambos fueron detenidos y encarcelados, sin ninguna orden y sin cometer ningún delito, por lo que se les exigió el pago de 30 mil pesos por cada uno para su liberación.
Por esa razón, Vásquez Bautistas decidió interponer una denuncia ante la Fiscalía General del Estado; esto ocasionó la molestia de las autoridades municipales y comunales, quienes accedieron a liberarlos, bajo la advertencia de que ya no tendrían derechos como ciudadanos de esa localidad ni comuneros, tras esto prendieron fuego a su casa y dos invernaderos y saquearon sus propiedades.
Este jueves, Silvia aseguró que fue retenida junto con otras cuatro mujeres, dos de ellas sus hermanas y su cuñada, además de dos menores de edad; acusó que Bolaños Vásquez, junto con varias personas, les bloqueó el camino y las obligó a bajar de la unidad en la que viajaban, tras esto incendiaron el vehículo, hubo golpes y amenazas.
Fue hasta la tarde del viernes que fueron puestas en libertad luego de la intervención de la Secretaría General de Gobierno; sin embargo, para lograr esto se pactó con las autoridades estatales que no podrán ingresar nuevamente a San Andrés Yutatio.
Silvia Vásquez, dijo que con esto se han quedado en la calle, pues todas sus pertenencias se quedaron en sus hogares, además de que ahora no tienen dónde vivir ni un medio para hacerse de lo necesario.