El presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió que continúa la falta de equidad en la distribución de vacunas anti-Covid en el orbe. “Parece que actuamos como profetas porque, ¿qué está sucediendo?, de los cerca de 200 países del mundo, sólo 80 tienen hoy acceso a la vacuna. Es decir, 120 países no tienen ni una sola dosis, y de esos 80 que cuentan con vacuna, 10 acaparan 80 por ciento de todas” las inyecciones, dijo.
A nivel doméstico, reiteró que el biológico será aplicado de manera universal y gratuita, aunque aclaró ello no significa que sea “regalada” porque se compra con presupuesto público, construido con los impuestos que pagan los mexicanos y también con lo obtenido en el combate a la corrupción.
Desde temprano en la conferencia de prensa y luego en gira por Sonora, destacó que es inmoral saltarse la fila para recibir el antiviral.
“Ya esos vivillos caen mal, son chocantes. Ya no es como antes, puedes decir: ‘yo tengo un amigo, di un dinero, di una mordida y ya me vacunaron’. Bueno, ¿y qué? ¿Dónde está la moral? ¿O es un árbol que da moras? ¿Y para qué vamos al templo entonces? ¿Para qué vas a la iglesia si eres deshonesto? Entonces, ya chole con eso, o sea, ya”, expresó.
El Presidente señaló que el general Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional, es el responsable de la logística de distribución de la vacuna “y le dio Covid”, por lo que no “brincarse” el turno es un acto de honestidad.
Relató que su gobierno empezó desde hace ocho meses a hacer acuerdos con las farmacéuticas para contar con la vacuna y a pedir igualdad en el acceso en todo el mundo. Por ello, lamentó que haya acaparamiento y que incluso países estén obligando a sus farmacéuticas a no exportar, olvidando la fraternidad universal.
Reiteró que en México no faltará la vacuna, a la cual se refirió como “la lucecita que se ve al final del túnel” en esta pandemia.
En cuanto a medicinas, el mandatario subrayó que “había tanta, tanta corrupción” en el abasto que ha costado mucho trabajo enfrentar a la mafia de cuando mucho 10 empresas que dominaba ese sector, en el cual el gobierno eroga más de 100 mil millones de pesos. Acusó incluso que los grandes laboratorios eran los que imponían a funcionarios en la Cofepris para determinar qué medicamento se autorizaba y cuál no.