Ciudad de México. En la fiscalización de la cuenta pública 2019, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró diversas irregularidades en el Programa Jóvenes Construyendo el Futuro de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
En la Auditoría de Desempeño menciona que algunos becarios estaban inscritos en otros programas gubernamentales, que no se verificó que no trabajaran ni estudiaran al momento del registro y que tuvieran el rango de edad establecido para ser beneficiario del apoyo, entre otros.
En tanto en auditoría de desempeño en la modalidad educativa refiere que algunos becarios superaron la edad para ser elegibles para el programa. “En cuanto a tener hasta 29 años cumplidos al momento de solicitar la beca, de los 357 mil 923 beneficiarios del programa, el 99 por ciento (354 mil 179 alumnos de la modalidad educativa) cumplio con la edad máxima establecid, al ubicarse en el rango de edad de 17 a 29 años, mientra que el uno por ciento (3 mil 744 alumnos) restante la superó, al presentar un rango de edad de 30 a 72 años”.
La ASF identificó que 0.2 por ciento de los beneficiarios del programa, que total eran en 2019 un millón 120 mil 543 beneficiarios, “presentaron duplicidades en los registros de otros programas nacionales que otorgan apoyos. De los mil 681 becarios identificados mediante la CURP que coincidieron en los registros de beneficiarios de otros programas gubernamentales, mil 515 becarios que recibieron recursos del PJCF también recibieron apoyos del Programa Producción para el Bienestar”.
Asimismo, cinco recibieron el Programa Producción para el Bienestar y Precios de Garantía al mismo tiempo y 126 becarios se beneficiaron de forma simultanea por el Programa Precios de Garantía y 34 recibieron también apoyos del esquema Microcréditos para le Bienestar; entre otros casos.
También “con los registros provenientes de la Plataforma Digital del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro, se identificó que para 2019, se registraron un millón 120 mil 543 beneficiarios, con la revisión de la CURP, se precisó que 0.8 por ciento se ubicaron fuera del rango de edad establecido, porque 8 mil 853 jóvenes registraron 17 años y 3 contaron con 30 años al momento de su inscripción”.
De igual forma la STPS “no acreditó que en 2019 los beneficiarios del programa cumplieron con los requisitos de no trabajar ni estudiar al momento del registro; no presento evidencia de la implementación del mecanismo convenido con el IMSS para confirmar que los solicitantes del programas no estudian ni trabajan; no especificó el mecanismo empleado para documentar la entrega de la identificación oficial, comprobante de domicilio, comprobante de grado de estudios, la autofotografía del rostro del solicitante, así como del dictamen o documento comprobatorio homólogo de la revisión del cumplimiento de los requisitos, tampoco documentó que la información del beneficiario fuera incluida en la plataforma digital”.