Tarmiyah, Irak. Fuerzas de seguridad iraquíes se enfrentaron este sábado a miembros del grupo Estado Islámico (EI) al norte de Bagdad, dejando cinco víctimas mortales entre los yihadistas y dos en el personal de seguridad.
Un fuerza conjunta del ejército y de combatientes tribales aliados atacó un escondite del EI en las llanuras de Tarmiyah, según un comunicado militar.
"Nos enteramos de que el grupo EI celebraba ahí una reunión en la que se planeaban ataques contra la capital Bagdad", explicó Ahmad Salim, responsable de las operaciones, en el lugar del combate.
En los enfrentamientos perecieron cinco yihadistas y dos combatientes de las fuerzas tribales de apoyo a los militares.
Este enfrentamiento se produce cerca de un mes después de que dos ataques suicidas dejaran más de 30 personas muertas en Bagdad, en el más sangriento atentado contra la capital iraquí en tres años.
Según las fuerzas de seguridad, dos yihadistas habían logrado infiltrarse previamente en la ciudad, procedentes del norte.
Pocos días después, once combatientes de las Fuerzas de Movilización Popular, una coalición paramilitar integrada en el Estado iraquí, murieron el 23 de enero en una emboscada atribuida al EI, al norte de Bagdad.
A fines de enero, el primer ministro iraquí, Mustafa al Kazimi, anunció la muerte de Abu Yaser al Isaui, presentado como el jefe en Irak del grupo Estado Islámico.
Pese a sus recientes ataques, el EI se halla ahora reducido en Irak a células aisladas en zonas desérticas y montañosas.
Irak declaró en 2017 que este grupo yihadista había sido derrotado al cabo de tres años de combates, con la ayuda aérea de la coalición liderada por Estados Unidos.