Washington. El presidente estadunidense, Joe Biden, proclamó ayer el “regreso” de la alianza transatlántica, en un discurso con miras a restablecer a Estados Unidos como líder de Occidente contra lo que llamó un ataque global a la democracia. La intervención de Biden se dio en la Conferencia de Seguridad de Múnich, un acto anual celebrado ahora por videoconferencia debido a la pandemia de Covid-19.
En su primera gran alocución internacional sobre política exterior desde que asumió el 20 de enero, Biden aseveró que los aliados tradicionales de Estados Unidos deben volver a tener confianza en el liderazgo de Washington.
“Estados Unidos está decidido a volver a comprometerse con Europa, a consultar con ustedes, a recuperar nuestra posición de liderazgo confiable”, sostuvo.
Biden, quien habló antes con líderes del Grupo de los Siete (G7, formado por Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá), que reúne a las economías más fuertes del mundo, indicó que su gobierno enfatizará nuevamente la construcción de alianzas.
“Nuestras asociaciones han perdurado y crecido a lo largo de los años porque están arraigadas en la riqueza de nuestros valores democráticos compartidos. No son transaccionales, no son para sacar algo”, señaló.
Biden añadió que no busca un regreso a “los bloques rígidos de la guerra fría” e insistió en que la comunidad internacional debe trabajar unida en temas como la pandemia de coronavirus y el cambio climático, incluso si hay profundos desacuerdos.
El regreso de Estados Unidos al Acuerdo de París sobre el clima, que se formalizó este viernes, es una prueba de las intenciones de Washington, aseveró.
Pero Biden hizo duras advertencias sobre las amenazas que, según expuso, plantean Rusia y China.
Ataque a la democracia
“El Kremlin ataca nuestras democracias y usa la corrupción como arma para intentar socavar nuestro sistema de gobierno; busca debilitar el proyecto europeo y nuestra alianza de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN)”, apuntó.
De igual forma, apremió a los aliados europeos a unirse ante los retos políticos y económicos que plantea China, señalando que es posible “hacer frente a los abusos económicos y la coerción del gobierno chino, que socavan los cimientos del sistema económico internacional”.
Señaló que “las empresas chinas deben cumplir con el mismo estándar” que las empresas estadunidenses y europeas.
Biden reiteró su compromiso de regresar a las negociaciones internacionales con Irán sobre su programa nuclear, pero indicó que es necesario “abordar las actividades desestabilizadoras de Irán en todo Medio Oriente”.
En la conferencia de Múnich, la canciller alemana, Angela Merkel, hizo eco de la advertencia de Biden sobre Moscú: “Es muy importante que desarrollemos una política transatlántica hacia Rusia”.
Tras casi un año de reuniones por video, los líderes del G7 no lograron escapar de la maldición del micrófono abierto, cuando el primer ministro británico, Boris Johnson, tuvo que decirle a Merkel que cerrara el suyo, cuando una voz en alemán interrumpió al premier. “¿Nos oyes, Angela?”, bromeó Johnson por encima del alemán, riéndose: “Creo que deberías silenciarte”.
Biden visitó hoy en Michigan una planta de fabricación de vacunas anti-Covid perteneciente a la empresa Pfizer, e insistió en la necesidad de acelerar la producción de esos fármacos. Volvió a cuestionar la estrategia de Trump y recalcó que el republicano no ordenó suficientes vacunas ni logró movilizar los recursos necesarios para administrar las dosis.
Funcionarios de la Casa Blanca informaron ayer que hay un atraso en las campañas de vacunación debido a las tormentas de invierno que afectaron a varios estados del pais durante los días recientes.
Aliado de Trump violó embargo de armas a Libia
Erik Prince, ex jefe de seguridad de la compañía de seguridad internacional y prominente simpatizante del ex presidente Trump, violó el embargo contra la venta de armas a Libia impuesto por la Organización de Naciones Unidas(ONU), según investigaciones hechas por el organismo mundial, informó el diario The New York Times.
En un informe confidencial obtenido por el rotativo y entregado al Consejo de Seguridad el jueves por los investigadores que lo redactaron, se afirma que Prince desplegó a una fuerza de mercenarios armados con aviones, lanchas artilladas y armamento antiaéreo al este de Libia, justo cuando se dieron en ese país cruentos combates en 2019.
El reporte afirma que esta operación tuvo un costo de 80 millones de dólares y que los mercenarios planeaban formar un escuadrón para asesinar selectivamente a varios comandantes libios. Prince no es sólo un ex seal de la Marina, sino hermano de la ex secretaria de Educación de Trump, Betsy DeVos.
Blackwater es además la compañía cuyos contratistas asesinaron a 17 civiles iraquíes en 2007. Aunque cuatro de ellos fueron condenados, uno a cadena a perpetua y los demás a fuertes penas de prisión tras ser encontrados culpables de crímenes de guerra, Trump los indultó como uno de sus últimos actos como presidente.