Los primeros dos cargamentos de gas natural licuado (GNL) adquiridos por México comenzaron a llegar este viernes a las costas mexicanas como parte de la estrategia del gobierno para compensar la interrupción en el suministro desde Texas, ocasionado por un fuerte temporal que congeló los ductos que transportan el combustible entre ambos territorios.
La llegada de los buques con el GNL ocurrió mientras Estados Unidos aumenta la exportación de gas natural a México a través de gasoductos, pese a una orden ejecutiva emitida esta semana por el gobernador de Texas, Greg Abbott, quien ayer dio marcha atrás y canceló la prohibición de enviar el combustible fuera del estado.
El miércoles pasado, el gobierno mexicano anunció la compra de emergencia de cuatro cargamentos de gas natural licuado, que llegarían en buques desde distintas regiones. Con ese combustible busca compensar parte de la pérdida de suministro desde Texas, origen del 70 por ciento del gas natural que consume el país y de 90 por ciento del que emplea la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El flujo de gas de Texas a México se interrumpió el lunes, luego de que un vórtice polar provocó tal descenso de temperaturas que impidió la operación de la infraestructura energética de ese estado. México emplea gas texano tanto para la industria como para la generación de electricidad.
El petrolero Flex Courageous, con alrededor de 162 mil 850 metros cúbicos de GNL estadunidense, descargó en la terminal de Manzanillo, Colima, en costas del Pacífico mexicano, mostraron datos de Refinitiv Eikon. Con ello, el gobierno mexicano planea suministrar gas a varias centrales eléctricas.
Un segundo petrolero, el Seri Balhaf, con unos 151 mil 300 metros cúbicos de GNL estadunidense, arribó en la tarde a la terminal de Altamira, Tamaulipas, en el Golfo de México, luego de que el mal tiempo causara retrasos, dijo a Reuters un funcionario de la autoridad portuaria.
Se espera que lleguen al menos dos cargamentos más desde Asia en unos días, adelantó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los productores estadunidenses también están aumentando el suministro de gas natural a México por los gasoductos, luego de que una ola de frío interrumpió gran parte de las exportaciones esta semana, lo que afectó principalmente las compras al contado de gas de México a Texas.
El suministro aumenta pese a una orden ejecutiva del gobernador de Texas, Greg Abbott, el pasado miércoles, que prohíbe las exportaciones fuera del estado hasta el domingo, la cual fue transmitida el jueves a los productores por el regulador estatal de petróleo y gas.
México tiene poca capacidad para almacenar gas natural a pesar de que su generación de electricidad depende principalmente del combustible.
El país pactó 24 contratos de suministro de gas y 18 contratos de transporte para importar de proveedores estadunidenses, en su mayoría de Texas, de acuerdo con datos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La nación adquiere alrededor de 30 por ciento del gas que necesita para los estados del norte mediante compras al contado a Estados Unidos, lo que, según analistas, agrega vulnerabilidad a las importaciones.
Las exportaciones estadunidenses por gasoductos a México aumentaron a 4 mil 900 millones de pies cúbicos por día (mmpcd) el jueves, desde un mínimo de 13 meses de 3 mil 800 mmpcd el martes. Antes de la profunda helada en el sur de Estados Unidos, las exportaciones a México por ducto llegaron a 5 mil 700 mmpcd, según datos preliminares de Refinitiv Eikon.