Un corto circuito en un transformador de la planta baja del Puesto Central de Control del complejo Delicias del Sistema de Transporte Colectivo Metro fue la causa del incendio del pasado 9 de enero, concluyeron los resultados de los estudios periciales de la Fiscalía General de Justicia (FGJ), con lo que se determinó que el siniestro fue “fortuito y no previsible”.
La conflagración dejó una oficial de la Policía Bancaria e Industrial fallecida, por lo que especialistas de la FGJ determinaron que se debió a la caída accidental desde el cuarto piso del inmueble, luego de que el incendio empezó a las 5:26 de la madrugada por el corto en el transformador denominado TA-1, uno de los cuatro que había en el inmueble.
En un mensaje en video, el perito en mecánica y seguridad industrial, Leonardo Chávez, dijo que el transformador pesaba 58 toneladas, de las cuales 14 correspondían al aceite para su funcionamiento, 40 a tanques y accesorios y cuatro por las campanas; alcanzó una temperatura que osciló entre mil y mil 500 grados Celsius, lo que ocasionó el debilitamiento y colapso del equipo.
Para la coordinadora general de Investigación Forense y Servicios Periciales, María Severina Ortega, la conflagración “no se debió a falta de mantenimiento, pues existen las bitácoras de los mismos, y fue por un corto circuito en uno de sus transformadores”, por lo que insistió en la importancia de “recalcar la magnitud de la expansión del incendio, ya que en menos de 15 minutos el área del transformador TA-1 se encontraba completamente incendiada”.
El director de criminalística, Manuel Izquierdo, defendió la postura de que el siniestro tuvo como origen un corto circuito en uno de los embobinados, lo cual fue apoyado por expertos en materia de incendios y explosiones quienes determinaron que “se propagó de manera muy rápida a través de la conducción, convección y radiación del fuego” en el edificio.
Hasta el momento no hay ninguna persona señalada como responsable por ese incidente que dejó sin servicio a las 99 estaciones de las líneas 1 a la 6 del Metro, además de que aún no se concluye el avalúo de los daños en el edificio, el cual sigue en estudio, así como tampoco el de los equipos siniestrados.
Los expertos en arquitectura forense se encuentran en espera de los resultados del laboratorio que se realizaron al edificio para determinar si los daños estructurales ameritan reparación o su demolición.
En los peritajes participó personal de 11 diferentes áreas que determinó que no hubo gas como acelerador u origen del fuego.