En sesión del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas, el canciller Marcelo Ebrard Casaubón llamó a la comunidad internacional a evitar el acaparamiento de las vacunas contra el Covid-19 y a acelerar las primeras etapas en las entregas del Fondo de Acceso Global para Vacunas Covid-19 (Covax, por sus siglas en inglés).
Dicho mecanismo, aseguró, “es una herramienta fundamental, innovadora y extraordinaria, pero también debemos reconocer que ha resultado insuficiente hasta ahora, y que el escenario que queríamos evitar, desgraciadamente se está confirmando, al día de hoy no se han distribuido vacunas vía este instrumento multilateral”.
Alertó que de continuar esta tendencia, los países de menores recursos “no tendrán acceso generalizado (a los inmunológicos) hasta la mitad de 2023”. Recordó que la pandemia ha tenido un impacto social y económico devastador en todo el mundo, “pero ha afectado sobre todo a los más pobres y vulnerables el planeta”.
Tras señalar que México forma parte de las naciones que lograron acceder a los biológicos, con el apoyo de la Unión Europea, India y China, subrayó que “tenemos que ver por todos los demás y los que tenemos posibilidades debemos ser solidarios con los que no las tienen”.
Ante los representantes de los países miembros del Consejo de Seguridad destacó que de acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “tres cuartas partes de las primeras dosis de vacunas administradas en el mundo se concentran en apenas 10 países que representan 60 por ciento del producto interno bruto global”.
Agregó que se estima que hay más de 100 naciones en las que “no se ha aplicado ni siquiera una dosis o alguna sola de carácter simbólico, hay muchos países afectados con este proceso”.
Lo que ocurre, enfatizó, abre una enorme brecha entre ese pequeño grupo de países y el resto de la comunidad internacional “que no tiene acceso suficiente a las vacunas. Podríamos decir que nunca habíamos visto una división tan profunda que afectara a tantos en tan poco tiempo, y urge actuar”.
El secretario de Relaciones Exteriores instó a “revertir la injusticia que se comete porque de ello depende la seguridad de toda la humanidad, por ello alentamos a la comunidad internacional a evitar los mecanismos que puedan impedir la distribución de las vacunas y a que, entre todos, fortalezcamos las cadenas de suministro que promuevan y garanticen el acceso universal a los inmunizantes”.
A nombre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), cuya presidencia pro témpore ostenta México, Ebrard Casaubón reiteró el llamado para acelerar el acceso a vacunas vía Covax, “y reducir el acaparamiento evidente que estamos enfrentando toda la comunidad internacional”.
Señaló que el Consejo de Seguridad “puede y debe desempeñar un papel activo y decisivo para que este objetivo se pueda alcanzar”, y demandó a los estados miembros asumir de forma comprometida la Resolución 74/274 para “garantizar, en la realidad, el acceso universal, justo, equitativo y oportuno a todos los países a las vacunas”, reto que de no resolverse, aseguró, “será también el principal riesgo para la seguridad de la humanidad”.