Lima. El médico Germán Málaga, quien dirigió en Perú los ensayos clínicos de la vacuna del grupo farmacéutico chino Sinopharm contra el Covid-19 durante 2020, testificó ayer ante el Congreso en una audiencia sobre las presuntas inmunizaciones irregulares de 487 altos funcionarios, incluido al destituido presidente Martín Vizcarra (2018-2020).
Málaga, de la Universidad Peruana Cayetano Heredia, declaró ante la Comisión de Fiscalización, que el 1º de octubre, Vizcarra, cuando aún era presidente, le pidió ser inmunizado, mientras los ensayos de la vacuna china de Sinopharm, entre 12 mil voluntarios peruanos, estaban en desarrollo. Afirmó que el mandatario sabía que se trataba de una “vacuna activa” y no de un placebo.
Vizcarra “finalmente tomó una decisión y me pidió dos vacunas; al día siguiente fui (al palacio de gobierno). En ese momento, sinceramente no me pareció un acto de ningún tipo fuera de contexto, era el presidente de la República, yo soy médico de primera línea y sabía de la necesidad de protección y no pensé en ningún aspecto legal, ni político, ni hice ningún cálculo”, argumentó Málaga, en sesión virtual.
Al ratificar que el gobernante y su esposa no eran “voluntarios” del ensayo, el científico aseguró que inmunizó a ambos por “cortesía” y sin recibir ventajas económicas, pues no es un “dealer de vacunas”.
Vizcarra alegó la semana pasada que fue “voluntario” en el ensayo de la vacuna china de Sinopharm, antes de que la misma recibiera la luz verde el 31 de diciembre; pero la Universidad Peruana Cayetano Heredia, a cargo del estudio, negó que el mandatario formara parte de la prueba.
El ex mandatario, que fue destituido bajo cargos de corrupción el pasado 9 de noviembre en medio de un alto nivel de aprobación, ofreció anteayer “disculpas” a sus compatriotas “por no haber informado de ese hecho en ese momento”, pero insistió en que fue voluntario del ensayo, igual que su esposa y un hermano.
La fiscalía abrió una investigación preliminar contra el ex gobernante, a quien se le podría iniciar un proceso judicial por presuntos delitos de negociación incompatible o colusión, pues si bien no concretó acuerdos de compra con Sinopharm, participó en las negociaciones.
El presidente Francisco Sagasti reveló antenoche que 487 personas se vacunaron irregularmente, entre ellas dos ministras y otros funcionarios de su gobierno; prometió sancionarlos y despedirlos.
“Es el peor error de mi vida”, dice ex ministra
Entre las personas que se beneficiaron con la inoculación sin que les correspondiera se encuentran la ex ministra de Salud Pilar Mazzetti, que hace unos días ne-gó haberla recibido, y la ex canciller Elizabeth Astete, quien renunció el lunes al cargo tras admitir que se había vacunado. Mazzetti reconoció ayer en una carta haberse vacunado de forma extraoficial y aseguró que ha sido el “peor error” de su vida.
El nuevo canciller, Allan Wagner, dijo ayer que espera que el escándalo no afecte las próximas entregas de fármacos de Sinopharm y que la relación con el gobierno de China se mantenga en “un clima de confianza”.
Afirmó que el vínculo con la nación asiática es “indispensable” porque es un importante proveedor de las vacunas contra el Covid-19.
Refirió que con Sinopharm “se está a punto” de suscribir un contrato de entrega de un nuevo cargamento en marzo de unas 12 millones de vacunas.
Perú también tiene acuerdos con Pfizer por 20 millones de dosis,con AstraZeneca por 14 millones y con la alianza internacional Covax por 13.2 millones. También negocia suministros con Johnson & Johnson, Moderna, Novavax, Gamaleya, Sinovac y Curevac.
Perú anunció el 6 de enero un acuerdo con el laboratorio chino para adquirir hasta 38 millones de dosis de la vacuna. El primer millón llegó en la segunda sema-na de febrero, para comenzar el plande inmunización con la aplica-ción de dosis al personal sanitario.
El escándalo de presunta corrupción en medio de la segunda ola de la pandemia – con un millón 238 mil 501 casos y 43 mil 880 defunciones– surgió hace cinco días en medio de la campaña de las elecciones de abril. Inicialmente el llamado Vacunagate salpicaba sólo a Vizcarra, pero luego se extendió hasta el actual gobierno.