Con una serie de torpes maniobras, al mediodía del 14 de febrero el líder nacional de Morena, Mario Delgado, corroboró lo que la militancia de ese partido en todo el país ha denunciado como el desmantelamiento del Movimiento de Regeneración Nacional y del proyecto de la autodenominada 4T: desde la Ciudad de México, Delgado cometió el error de anunciar como precandidato a edil de San Luis Potosí (SLP) al alcalde panista con licencia Xavier Nava Palacios, rompiendo con ello la equidad de la contienda interna y vulnerando los derechos políticos de los otros precandidatos, entre quienes se encuentran militantes lopezobradoristas de la talla de Enrique Rivera Sierra, abogado y activista que creció al lado de la lucha civilista del doctor Salvador Nava Martínez. El anuncio llegó justo cuando un sector mayoritario de las huestes morenistas de SLP se ha movilizado para desconocer a Mónica Rangel, ex secretaria de Salud del gobierno priísta de Juan Manuel Carreras, impuesta por Delgado como candidata de Morena al gobierno estatal. Para muchos potosinos seguidores del presidente López Obrador esto representa otra puñalada torticera a las aspiraciones de cambio, además del riesgo de que el grupo político y económico que Nava representa mantenga sus planes depredadores sobre el valle de SLP.
Las dimensiones del agravio hacia quienes dedicaron años a la construcción de Morena-SLP para apoyar a AMLO en su camino a la Presidencia, sólo son comprensibles cuando se revisa la trayectoria de Xavier Nava. Montado sobre el apellido de su ilustre abuelo, manipulación que le ha redituado con creces, Nava Palacios consolidó su paso por la política entre 2000 y 2006, periodo en que trabajó de asesor del hoy prófugo Emilio Zebadúa. En 2015 retornó a la política de la mano del PRD y de Ricardo Gallardo Juárez, entonces candidato a la presidencia municipal de la capital potosina y hoy señalado, con su hijo Ricardo Gallardo Cardona (actual candidato del Partido Verde al gobierno de SLP), por el desvío de más de 700 millones de pesos de dinero público (https://cutt.ly/hkBr7It). Nava Palacios fue entonces uno de los impulsores de Gallardo Juárez (https://cutt.ly/AkBr1NO) justo cuando Gallardo Cardona se encontraba preso en un penal de alta seguridad acusado de delincuencia organizada y uso de recursos de procedencia ilícita. Así, aliado al gallardismo, Nava Palacios llegó como diputado electo por el sexto distrito a la Legislatura 63.
Sin terminar su encargo, en 2018 Nava Palacios decidió buscar la presidencia municipal de SLP ahora contra el intento de relección de su otrora padrino Gallardo Juárez, entonces edil perredista. Reclutado por los partidos Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano, Nava Palacios obtuvo la candidatura convirtiéndose repentinamente en el más acérrimo crítico del gallardismo y mostrando sus dotes camaleónicas, pues además de asumir el discurso del PAN, se dedicó a atacar a Morena y a AMLO. Con el impulso de sus nuevos aliados, entre quienes se encontraban Javier Corral, Marcelo de los Santos, Alejandro Zapata y empresarios de la industria inmobiliaria (https://cutt.ly/TkBrCEk), Nava Palacios ganó la capital potosina e inició uno de los gobiernos más desastrosos de que se tenga memoria.
Como alcalde, Nava Palacios impulsó nuevos planes de ordenamiento poblacional y urbano diseñados a la medida de los intereses inmobiliarios que lo apoyaron. Dichos planes tuvieron como prioridad retirar la protección legal que desde 2003 goza la parte baja de la Sierra de San Miguelito (SSM) como Área Natural de Protección al Patrimonio Paisajístico y Recarga. Nava Palacios, como operador de los fraccionadores, impulsó un opaco procedimiento para integrar parte de la SSM al mercado de tierras, proceso que hasta este momento ha logrado detener la resistencia ciudadana y la actual secretaria del Medio Ambiente María Luisa Albores (https://cutt.ly/pkBu0G0). Además de recibir el apoyo de los gobernadores de la Alianza Federalista, Nava Palacios participó en octubre de 2019 en la manifestación de presidentes municipales frente a la Puerta Mariana de Palacio Nacional contra las políticas de AMLO. Asimismo, utilizó el cargo para intentar proyectarse como futuro candidato a la gubernatura de SLP: en mayo de 2019, por ejemplo, aumentó el presupuesto de comunicación social del ayuntamiento potosino de 37 millones a 100 millones de pesos, dinero que usó para proyectar su imagen personal.
Confiado en lograr la candidatura al gobierno de SLP, Nava Palacios pidió licencia en noviembre de 2020 y se enrolló en el proceso interno del PAN. Como precandidato afirmó: “Tenemos que irle a ganar al partido del Presidente, a Morena y a sus aliados que son una porquería [sic], no podemos permitir que se apoderen de San Luis”. Tras perder la contienda panista y casi sin alternativas, Nava Palacios se movió hace días a la Ciudad de México para negociar con Delgado e iniciar su milagrosa transfiguración en un devoto de los principios de la 4T: no mentir, no robar y no traicionar (sic). Para colmo, el mismo Delgado ha notificado a Morena-SLP que no habrá encuesta y que el candidato a la alcaldía lo decidirá el Comité Ejecutivo Nacional de ese partido. Con ello, Nava Palacios y Delgado han quedado en calidad de sepultureros de Morena y de la 4T.
*Investigador de El Colegio de San Luis.
