Ciudad de México. De aprobarse la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica México tendrá efectos negativos en tarifas, inversión y salud de la población, advirtió el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), al tiempo que expuso la necesidad urgente de implementar un amplio, profundo y contundente plan para la recuperación económica del país.
En conferencia vía remota, Ángel García-Lascurain, presidente del organismo privado, señaló que la reforma eléctrica impulsada por el gobierno federal es un retroceso a la competitividad del país, lo que se traducirá en mayores tarifas para los consumidores.
Asimismo, destacó que en el mediano y largo plazos habrá una afectación en la salud de los mexicanos, pues busca impulsar fuentes de energía sucia.
Además, dijo el presidente del IMEF, habrá un fuerte impacto en las expectativas de inversión, pues además de que se dará marcha atrás a los proyectos avanzados, abonará a la incertidumbre que hay en el país desde 2019, ahuyentando posibles nuevas inversiones.
“Habrá un impacto profundo en la inversión dando como resultado una recuperación tímida e inestable. Esto en un momento en el que se necesitas fuertes medidas que impulsen la reactivación económica del país”, apuntó García-Lascurain.
En este sentido, Gabriel Casillas, presidente del Comité de Estudios Económicos del IMEF, resaltó que el impacto de una reforma de ese tipo se verá una vez que todo regrese a la normalidad, pues en lugar de volver a crecer a tasas promedio de 2 por ciento como en los últimos años, ahora se estará por debajo, tal vez a 1.7 por ciento.
Por otro lado, el IMEF urgió al gobierno a implementar un plan amplio, profundo y contundente de recuperación con la participación de todos los sectores.
“Es fundamental estimular el crecimiento de la inversión como elemento central de la generación de empleo y para la recuperación de la demanda interna, así como maximizar el impacto de la reactivación de los mercados de exportación sobre las cadenas productivas nacionales”, dijo el organismo.
Desde su punto de vista, la ausencia de un plan de recuperación profundizará el daño sobre la planta productiva nacional y prolongará la duración de la recuperación, con el consecuente impacto negativo sobre el bienestar de las familias mexicanas.
De acuerdo con la más reciente encuesta de expectativas entre los miembros del Comité de Estudios Económicos del IMEF, la economía mexicana se recuperará a un ritmo de 3.8 por ciento anual, por encima de 3.5 por ciento estimado en la encuesta de enero.
No obstante, Casillas señaló que México puede crecer 5 por ciento este año; sin embargo, depende de que el gobierno acelere el proceso de vacunación.