La crisis que provocó la pandemia de Covid-19 generó ventajas para quienes pueden comprar una casa. En 2020, las propiedades nuevas o usadas subieron de precio, pero a una tasa menor, comparada con el par de años pasados, un hecho que se combinó con bajas tasas de interés para los créditos hipotecarios, según cifras oficiales y opiniones de especialistas y participantes del sector consultados por La Jornada.
“Para las personas que tienen las condiciones necesarias hoy es un buen momento para adquirir una propiedad, es decir, si se tienen los reclusos necesarios y se puede adquirir una deuda a largo plazo es un buen momento para adquirir un inmueble, además que las condiciones financieras están dadas”, dijo Pedro Fernández, presidente nacional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI).
Antonio Artigues, director ejecutivo de banca a particulares de Santander México, expresó que “la colocación de hipotecas en el último trimestre del año estuvo por encima de lo que se había vendido en el año. Los últimos cuatro meses de manera sucesiva no sólo rompimos nuestro récord de colocación, sino del mercado, con poco más de ocho mil hipotecas”.
El incremento en los precios de la vivienda a lo largo del año pasado, que estuvo marcado por la pandemia de Covid-19, es menor respecto de lo que se tuvo en años previos. Según el Índice de Precios de Vivienda, de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), hasta el tercer trimestre del año, último dato disponible, el precio de la vivienda nueva creció 6.3 por ciento y el de la usada lo hizo 5.7 por ciento.
Son incrementos menores a los registrados en 2019, cuando el precio de la vivienda nueva creció un promedio de 8.9 por ciento y la vivienda usada 8.3 por ciento; mientras en 2018 ,las tasas fueron de 8.9 y 9.3 por ciento, respectivamente.
Según el portal inmobiliario Vivaanuncios, “con la crisis sanitaria de Covid-19, que se inició en marzo de 2020, los precios no han tenido bajas. Incluso, al hacer un recuento histórico, al cierre de 2005 y al término de 2018, los precios de la vivienda en México medidos por el Índice de la SHF se duplicaron”.
De acuerdo con el Reporte del Mercado Inmobiliario elaborado por la firma Lamudi, en el país, al cierre del año pasado, la Ciudad de México, Nuevo León, Quintana Roo, Jalisco, estado de México, Morelos, Puebla, Baja California Sur, Querétaro y Nayarit son las entidades con los precios más altos de vivienda.
Al momento de adquirir un inmueble, al cierre de 2020, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) es la entidad que más créditos dio, con un total de 501 mil 956 financiamientos, lo que representó una participación de mercado de 59 por ciento.
Le sigue la banca, con un total de 235 mil 785 hipotecas colocadas el año pasado y una participación de 27.7 por ciento; el Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (Fovissste) otorgó 66 mil 758 créditos, con 7.8 por ciento y el 5.5 por ciento restante se divide en otros participantes.
En lo que respecta a las condiciones financieras, desde el año pasado el Banco de México (BdeM) comenzó a bajar su tasa de interés de referencia para aminorar los impactos de la crisis, motivo por el que diversos bancos redujeron su tasa en el segmento hipotecario y ahora se ubican en los niveles más bajos, con un cobro de interés desde 7.5 por ciento.
“El 2020 significó un paradigma en la vivienda, pues ahora hacemos trabajo en casa o buscamos desarrollos cercanos a nuestros centros de trabajo, además, a lo largo del año, vimos que debido a la crisis, este sector se posicionó como un activo refugio para los inversionistas, debido a la poca volatilidad”, comentó Leonardo González, analista del mercado inmobiliario del portal propiedades.com.
Si bien las condiciones para adquirir un inmueble hoy son mejores, la menor apreciación en el precio de la vivienda no es tan conveniente para los vendedores, puesto que algunas personas por falta de liquidez tuvieron que deshacerse de sus inmuebles o dejar de pagar la hipoteca y regresar su casa al banco.
Pese a ello “hoy existen las condiciones para que la adquisición de un hogar por parte de las personas siga al alza. Pasa algo similar que el año pasado, vimos que en los primeros meses se redujo la colocación de créditos, pero en la segunda mitad del año repuntó por las tasas. Las hipotecas se colocan igual tanto en vivienda nueva y vivienda usada”, dijo Artigues, de Santander.
“El sector de la vivienda y el sector inmobiliario está más fortalecido que nunca. Nos recuperamos después de la crisis y así seguiremos, porque consideramos que se seguirán vendiendo casas y con los proyectos de construcción nos convertiremos en una fuente de empleo”, añadió Fernández.