La corrupción estaba acabando con el país y, en el caso de las obras públicas, los empresarios constructores y los funcionarios tenían hambre de más poder, expuso el presidente Andrés Manuel López Obrador. En su conferencia de prensa de ayer, confirmó que mantendrá los grandes proyectos de su gobierno. Para ilustrar la campaña de los opositores a esa nueva terminal aeroportuaria, recordó que antes de tomar posesión como Presidente dela República se torpedeó, desde los grupos de interés de siempre, la propuesta formulada en 2018.
“¡Cómo estaba el nivel de descom-posición, de corrupción, que corrompieron hasta a una institución de aviación que maneja todo lo relacionado con los espacios aéreos! Creo que se llama Mitre. Esa institución de fama mundial especializada llegó a dictaminar que no se podía, por interferencia aérea, hacer la terminal Felipe Ángeles.”
Dijo que aspira a que en su administración se realice el tendido de 2 mil kilómetros de nuevas vías férreas, modernizar puertos y dar el mantenimiento necesario en carreteras federales. Al referirse de nueva cuenta a la dimensión de las instalaciones en Santa Lucía, repuso: “Ayer ya quedó demostrado que sí se podía hacer el aeropuerto. Se demostró que pueden manejarse tres puertos aéreos al mismo tiempo: el Felipe Ángeles, el de la ciudad (de México) y el de Toluca”.
Aportó ejemplos de ex funcionarios y empresarios consentidos que amasaron pingües fortunas y la corrupción se extendió. En su exposición matutina de ayer dio cuenta decómo operaban las relaciones de una minoría para acumular riquezas fuera de lógica. “Era un engranaje en el que participaban integrantes de los gobiernos priístas y panistas, empresarios, intelectuales y medios de comunicación”. Honestidad vs negocios entre conocidos
Honestidad vs negocios entre conocidos
“Cuando fui jefe de Gobierno, construimos un hospital en Iztapalapa, ahí está el hospital, se llama Belisario Domínguez, 150 camas, 350 millones de pesos. Poco después se hizo un hospital en el estado de México, en Zumpango, mediante los llamados APP (asociación público privada que costó 6 mil millones.
“¿Quiénes son esos empresarios?, ¿quiénes autorizaron esos atracos? Se los dejo de tarea. Desde luego, son influyentes del más alto nivel. En Zumpango, el señor Juan Armando Hinojosa (ex propietario de la casa blanca en Las Lomas, y favorito de Enrique Peña Nieto). En el nosocomio de Ixtapaluca, del señor (Jerónimo) Gerard, cuñado de Carlos Salinas de Gortari. ¿Quién era el que autorizaba este tipo de inversiones o gastos? El que estaba de subsecretario de Hacienda, que luego fue secretario de Hacienda, cuñado de Gerard: José Antonio González Anaya.”
Tras describir acuerdos “inconfesables en la opacidad y el compadrazgo”, reiteró que la corrupción se dejó correr al abrigo de “especialistas” y medios de comunicación.
“Para que todos lo tengamos claro: si una obra costaba 100 millones, la podían cobrar hasta en mil millones, 10 veces más. Y fíjense cómo se encubría. No se trataba el tema ni en la academia, el tema de la corrupción estaba vedado, no hay materias que traten sobre este asunto en las universidades, los investigadores no consideraron que esto era importante, ya ni hablemos de los políticos. En el discurso no existía el tema de la corrupción; en los medios de comunicación, menos.”
Y ante la realidad de la construcción de la nueva terminal aérea, que se espera entre en operaciones en 2022, insistió que su avance es “todo un acontecimiento porque en poco tiempo se ha avanzado mucho. Es el aeropuerto en construcción más importante del mundo, es el más grande, con la tecnología más avanzada, con estándares de calidad, de primer orden”.