Ante la incertidumbre de cuántas personas serán recontratadas en marzo, el Colectivo de Trabajadores Capítulo 3000 del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) solicitó a la directora de esa instancia, Lucina Jiménez, una reunión urgente para tratar el tema.
Interrogado acerca de cuándo se avisará a los trabajadores sobre las recontrataciones y qué porcentaje de empleados no seguirá laborando en el Inbal, el subdirector general de administración, Pedro Fuentes Burgos, respondió que “continúa el análisis puntual para el ejercicio del Presupuesto 2021”.
El viernes, a las 12 horas, se retomarán las reuniones con los trabajadores, un rubro prioritario del instituto “es la revisión de las contrataciones de personal por honorarios que presta servicios en nuestros 84 centros de trabajo”, dijo.
Según los trabajadores, alrededor de 60 por ciento de los contratados por capítulo 3000 dejarán de laborar a partir del 1º de marzo.
En una carta enviada ayer a Luci-na Jiménez, los trabajadores manifestaron su preocupación por la escasa información del proceso de contratación para el periodo marzo-diciembre 2021.
“Hemos expresado a través de diversos correos electrónicos enviados a usted y su equipo, y de los cuales no hemos tenido respuesta, dicha preocupación.
“Esta situación se vuelve grave debido a la cercanía de la fecha límite de entrega de documentos (el 17 de febrero) para presentarlos ante el comité de adquisiciones el 25 de febrero y consolidar nuestra contratación. Solamente tenemos contrato para enero y febrero, y no tenemos certeza de la continuidad de las actividades que desempeñamos. Se trata del futuro inmediato de todas las familias que dependen de estas contrataciones.”
Empleados del Inbal, quienes pidieron omitir su nombre, explicaron a La Jornada que “por orden del Órgano Interno de Control hay compañeros a quienes se avisó que no serán recontratados, y a otros no les han pedido papeles para realizar ese trámite, por lo que asumimos que también dejarán de laborar.
“Es muy injusta la situación, pues en diciembre se nos aseguró que no habría despidos. Incluso, insistimos en que se hicieran planes y estrategias para el trabajo a distancia. Ahora, la subdirectora de administración de un área donde ya hay recortes asegura que recibió la observación por parte de contraloría de que cualquier persona de base puede hacer lo que hacemos los trabajadores de Capítulo 3000, cuando perfectamente saben que una cosa es lo que dice el papel acerca de nuestros puestos, y otra la labor que en realidad realizamos. De un día a otro, muchos nos quedaremos desempleados en plena pandemia.
“Han dicho a quienes ya no están recontratando que no hay presupuesto para trabajadores de honorarios y que son muchas las personas en esa situación.”