Ciudad de México. La Cámara de Diputados emitió la declaratoria de reformas a la Constitución para que el presidente, durante su encargo, pueda ser juzgado –además de por traición a la patria y delitos graves del orden común– por los delitos previstos en el catálogo de ilícitos que ameritan prisión preventiva de oficio y que son, entre otros, corrupción, feminicidio, delincuencia organizada, secuestro, ejercicio del uso abusivo de funciones o uso de programas sociales con fines electorales.
Al inicio de la sesión semipresencial de este martes, el pleno anunció que 17 congresos de los estados y el de la Ciudad de México aprobaron la reforma a los artículos 108 y 111 constitucionales, por lo que fue enviada al Ejecutivo para su publicación en el Diario Oficial de la Federación y entrada en vigor.
Durante la presentación de postura, legisladores de PAN, PRI y PRD resaltaron que la modificación no representa la eliminación del fuero presidencial, sino sólo se amplía el tipo de delitos por el que un presidente puede ser juzgado, pero en contraste Morena y sus aliados defendieron que “esta reforma hace historia, les guste o no”, porque se “toca una de las figuras más importantes” de la política mexicana.
La bancada mayoritaria precisó que se mantiene el mecanismo para que el Senado deba analizar, y en su caso, aprobar el retiro del fuero del Ejecutivo con el voto de las dos terceras partes de los senadores “como una medida contra las acusaciones frívolas y temerarias, aquellas que no persigan la justicia, sino la inhabilitación política”.
La presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, Aleida Alavez (Morena), recordó cómo el 7 de abril de 2005 la Cámara de Diputados aprobó el desafuero del entonces jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador.
Añadió: “Sabemos de qué son capaces en la oposición moralmente derrotada. El desafuero. Abrir una calle hacia un hospital fue el pretexto que usaron sus adversarios para pretender derrotar políticamente a un movimiento legítimo”.
Desde la tribuna, la diputada Mónica Bautista (PRD) sostuvo que “esta reforma es una simulación más de la 4T porque no se cambia el mecanismo para enjuiciar al titular del Poder Ejecutivo” y a su vez la diputada Esmeralda de los Ángeles Moreno (PES) indicó que con la reforma “se pone fin a la figura del presidente impune e intocable”.