Riad. Los rebeldes hutíes de Yemen atacaron este miércoles el aeropuerto internacional de Abha, en el sur de Arabia Saudita, asegurando haber tomado como blanco objetivos militares, un "crimen de guerra" para la coalición liderada por Riad.
La escalada interviene en pleno intento de apaciguamiento después que Estados Unidos revisara su política sobre Yemen, lo que dio esperanzas sobre una reanudación del proceso de solución política de un conflicto que dura ya varios años.
El ataque coincide con una visita a Riad del nuevo enviado estadunidense para Yemen, Timothy Lenderking, quien se reunió con el jefe de la diplomacia saudita, el príncipe Faisal bin Farhan, según una fuente oficial.
Las imágenes publicadas por los medios oficiales sauditas muestran el fuselaje de un avión destrozado en este ataque.
La televisión estatal informó de "un ataque cobarde de la milicia hutí contra el aeropuerto internacional Adha". "El incendio de un avión de pasajeros (…) está bajo control", agregó.
Esta cadena, El Ekhbariyah, que cita como fuente a la coalición liderada por Arabia Saudita en apoyo al gobierno yemení desde 2015, no informó de víctimas ni precisó si había pasajeros a bordo en el momento del ataque.
La coalición había indicado poco antes que interceptó dos drones armados en el sur del reino wahabita enviados por los rebeldes hutíes, que cuentan con el apoyo del chiita Irán.
La guerra en Yemen enfrenta desde hace más de seis años a los rebeldes hutíes, apoyados por Teherán, y a las fuerzas gubernamentales, respaldadas desde 2015 por una coalición liderada por Riad.
"Crimen de guerra"
"Tomar como objetivo el aeropuerto de Abha es un crimen de guerra y pone en peligro la vida de viajeros civiles", indicó la televisión estatal saudita, citando a la coalición.
El ministro de Información yemení, Muamar al Iryani, denunció en Twitter una operación dirigida por Irán para "desestabilizar la región", en referencia al gran rival regional de Arabia Saudita.
Un portavoz de los rebeldes respondió, por su parte, que "el régimen agresivo de Arabia Saudita ignoró todos [sus] llamados a no utilizar los aeropuertos civiles para fines militares".
"Esta operación es una respuesta a los ataques aéreos [de la coalición] y al bloqueo impuesto a nuestro pueblo", agregó el vocero hutí.
En la capital yemení Saná, bajo control hutí, los rebeldes anunciaron que habían atacado un aparcamiento del aeropuerto utilizado para "atacar militarmente al pueblo yemení".
El nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, revisó la política sobre este conflicto, dejando de apoyar militarmente a la coalición de Riad y retirando a los hutíes de una lista de organizaciones terroristas.
Pero Washington reafirmó su compromiso de ayudar a los sauditas a proteger su territorio de ataques del exterior.
"No hay una solución militar a la guerra en Yemen. Nuevamente exhortamos a los hutíes a cesar inmediatamente estas acciones agresivas", dijo en Washington el vocero del Departamento de Estado, Ned Price.
Hisham Sharaf, que ejerce de canciller de los rebeldes, dijo el martes que cesarán sus ataques cuando Arabia Saudita y las fuerzas leales al gobierno de Yemen detengan los suyos.
La guerra en Yemen ha dejado decenas de miles de muertos y millones de desplazados, según organizaciones internacionales, y provocó la peor crisis humanitaria actualmente en el mundo, según Naciones Unidas.