Existe el riesgo de que las afectaciones por la pandemia de Covid-19 reviertan los avances registrados en la reducción de las carencias sociales alcanzada hasta 2018, incluyendo la seguridad alimentaria, además de aumentar el número de personas en pobreza y pobreza extrema, señaló el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En su informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social 2020, el organismo detalló que la reducción de las actividades económicas a causa de la emergencia sanitaria, podría generar un aumento de entre 8.9 y 9.8 millones de personas con ingreso inferior a la línea de pobreza por ingresos, y de entre 6.1 y 10.7 millones de personas con ingreso inferior a la línea de pobreza extrema.
Durante la presentación y análisis virtual del informe, consejeros del Coneval y analistas destacaron la urgencia de reforzar la atención a grupos vulnerables y garantizar a la población el acceso a los bienes y servicios que hacen posible el ejercicio de sus derechos sociales.
Al analizar las consecuencias de la crisis sanitaria en el derecho a la educación, el informe señala que puede haber afectaciones derivadas por el tránsito al modelo de enseñanza virtual, que tiene que considerar el acceso desigual a las tecnologías de la información y que puede implicar complicaciones que afectan la calidad educativa. “Lo anterior puede incidir negativamente en el avance logrado en materia de rezago educativo, así como en el desempeño escolar y la permanencia en el sistema”, alerta el informe.
Respecto al acceso a seguridad social, se indica que esta cobra una mayor relevancia en las condiciones actuales, pues proporciona mecanismos de protección ante riesgos de salud asociados con el trabajo, la inseguridad económica y factores inherentes al curso de vida de las y los trabajadores y sus familias. No obstante, cita que hasta 2018, 57.3 por ciento de la población presentaba carencia por acceso a este derecho social, lo que la coloca en una mayor situación de vulnerabilidad ante las afectaciones de la crisis.
Presentado por el secretario ejecutivo del Coneval, José Cruz Marcelo, el informe 2020 señala que como resultado del análisis, se identificó que aunque se ha buscado la eficiencia en la operación de los programas sociales, a través de la eliminación de intermediarios, todavía existen oportunidades de mejora, sobre todo en la calidad de la información del Padrón Único de Beneficiarios, y el perfeccionamiento en la difusión de calendarios de los programas, y en la capacitación de los Servidores de la Nación.
Además, se señala que si bien existe una clara intención por construir un sistema de bienestar universal, los Programas Integrales de Bienestar se enfocan principalmente en las transferencias directas de apoyos económicos, más que en la prevención, mitigación y atención de los riesgos que enfrentan las personas en las distintas etapas del curso de vida.
En el amplio informe, detalla las posibles afectaciones, derivadas de la pandemia de Covid-19, en las condiciones socioeconómicas de grupos históricamente discriminados, como la población indígenas, mujeres, personas con discapacidad, niños y adolescentes, y adultos mayores, entre otros, así como una serie de recomendaciones para cada una de ellas.
El informe ya fue entregado a la Secretaría de Bienestar, a las comisiones de desarrollo de social de la Cámara de Diputados y del Senado, así como a la Auditoría Superior de la Federación, además de que se pueda consultar en https://www.coneval.org.mx/Evaluacion/Documents/Informes/IEPDS_2020.pd