El Instituto Nacional Electoral (INE) aprobó los lineamientos técnicos y jurídicos para la instrumentación por primera vez en comicios federales del voto en urnas electrónicas con carácter vinculante. Con experiencias previas en diversas entidades, el organismo instrumentará este modelo en 100 de las 165 mil casillas que se instalarán en la jornada del 6 de junio, las cuales estarán distribuidas en Coahulla y Jalisco, donde ya se han registrado estos procedimientos en procesos estatales.
Avalado recientemente por el Consejo General, su validez legal fue impugnada ayer por Morena, por considerar que el organismo se estaba extralimitando en sus funciones. Aunque en los comicios locales de Coahuila e Hidalgo, efectuados en octubre, se realizó una experiencia similar de forma exitosa, para el partido mayoritario la votación mediante esta vía representa una “franca violación” al principio de certeza y legalidad del voto, generando desconfianza.
En tanto que tiene carácter de programa piloto, la distribución de las 50 urnas en cada una de las entidades referidas se distribuirán de tal forma que, de forma cautelar, no tendrán una incidencia determinante en alguno de los distritos y elecciones locales donde se ubiquen. Esto, con referencia a diversas resoluciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación tanto en sus salas regionales como en la sala superior, que han avalado estos ejercicios con carácter vinculante a escala local.
Estos lineamientos tienen como propósito “establecer los aspectos jurídicos y técnicos necesarios que le den viabilidad al diseño y a la implementación del voto ciudadano empleando urnas electrónicas en una parte de las casillas del proceso”. Por ello, antes de dar inicio a la votación, se realizará una verificación del equipo, con funcionarios y representantes partidistas con la que se podrá corroborar que en una urna electrónica no existe votación alguna registrada.
Algunas de las ventajas de este voto, en consideración del INE, es que el ciudadano podrá elegir al candidato de su preferencia en la pantalla electrónica, votar en blanco o por candidato independiente, pero, en su caso, podrá corregir el sentido de su sufragio.
En la más reciente experiencia en la que participó el INE, se levantó un sondeo sobre el nivel de confiabilidad que tenían los ciudadanos en esta modalidad del voto y se desprendió que la gran mayoría –superior a 90 por ciento– expresó su confianza en la urna electrónica, por lo “cual puede concluirse como satisfactoria, a razón de los resultados obtenidos mediante la aplicación de encuestas”.