La Haya. El gobierno holandés suspendió el lunes las adopciones en países extranjeros después de que el informe de un comité investigador criticara a coaliciones gobernantes pasadas por ser “demasiado pasivas” ante años de abusos reportados, incluyendo el de madres pobres forzadas a dar a sus hijos en adopción.
El comité dijo que los abusos incluyen “la falsificación de documentos, el aprovechamiento de la pobreza de las madres biológicas y el abandono de niños a cambio de pagos o a la fuerza”. La prensa holandesa comenzó a reportar los abusos a finales de la década de 1960, pero los gobiernos anteriores no tomaron acciones decisivas para abordar los problemas, agregó.
“No sólo ha habido muchos abusos en el pasado, el sistema de adopción entre países todavía está abierto al fraude y, al día de hoy, continúan los abusos”, advirtió la comisión instaurada por el gobierno.
El gobierno debe “restaurar su relación dañada con los adoptados, padres adoptivos, padres biológicos y familias”, agregó.
El ministro de Protección Legal, Sander Dekker, reconoció que los gobiernos holandeses no han hecho lo suficiente.
Los gobiernos “deben tener una participación más activa en la prevención de abusos y esta es una conclusión dolorosa”, dijo Dekker. “Por eso, se deben disculpas y, por lo tanto, a nombre del gabinete hoy ofrezco esas disculpas a los adoptados”.
Las adopciones que ya están en proceso podrán continuar, dijo Dekker. También anunció que se establecerá un centro nacional de expertos para apoyar a personas adoptadas que buscan a sus familias biológicas.
El comité analizó adopciones entre 1967 y 1998 en cinco países: Bangladesh, Brasil, Colombia, Indonesia y Sri Lanka.