Los laboratorios que aplican pruebas de Covid-19 en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) tienen un flujo constante de usuarios nacionales y extranjeros, y no sólo de personas que van a viajar, pues también pueden acceder al servicio quienes no tengan boleto de avión, comentó personal que atiende los módulos.
En un recorrido realizado por La Jornada, viajeros resaltaron la importancia de tener ese servicio “a pie de avión”, ahora que diversos países, entre ellos Estados Unidos, piden prueba negativa a Covid-19 para ingresar a su territorio vía aérea.
Los precios son “más o menos accesibles”, aunque sí hay algunas diferencias dependiendo del laboratorio y también varían los tiempos de entrega.
En la Terminal 1, por ejemplo, hay tres módulos externos de diferentes laboratorios, uno está en la puerta F3, a unos pasos de los mostradores de la aerolínea American Airlines, y otros dos en la puerta 3, después de cruzar un puente, y se ubican en el hotel Camino Real; a un lado está la Clínica del Viajero de la UNAM, donde también se hacen estos estudios.
Pasajeros comentaron a este medio que cumplir con este requisito implica desembolsar mayor cantidad de dinero, “ya que ahora no sólo es el boleto de avión; también la prueba. Esto también es un negocio”, indicó Guadalupe, quien viajó a Los Ángeles, Estados Unidos.
En algunos pasajeros existe confusión porque dependiendo del destino es la prueba que aceptan las aerolíneas. Arturo comentó que para Europa son más exigentes y advirtió que además hay que tener cuidado con los tiempos. “Hay que hacerlas poco antes de viajar”.
En el laboratorio ubicado en la parte externa de la puerta F3, la prueba de antígeno estaba ayer en 750 pesos y la PCR en 2 mil; la primera, con entrega entre 20 y 30 minutos después; la segunda tarda de 18 a 24 horas. Personal del módulo indicó que no necesariamente hay que ser pasajero, “quien quiera se la puede realizar, sólo se requiere proporcionar nombre y fecha de nacimiento, y si vas a volar sí debes presentar el pasaporte”.
En la puerta 3, una de las trabajadoras que recibe a los usuarios expuso: “la prueba depende del país al que se vuele. Con nosotros, el antígeno cuesta 750 y la PCR está a 2 mil 500, pero ésta es con dos certificaciones de la Secretaría de Salud, por parte de la Cofepris y el Indre.
“Aquí tiene todas las certificaciones, no se la rechazan y no vuelve a pagar. Es que a algunos no les han aceptado (las aerolíneas) las pruebas, porque están mal, no traen el sello. Esto no es nada más por hacer pruebas, es importante saber que el usuario está sano”, dijo para convencer a una posible clienta.
En la Clínica del Viajero de la UNAM, que labora de las 4 de la mañana a las 19 horas, los precios son similares, el antígeno a 650 pesos y está en media hora; la PCR cuesta 2 mil 500 pesos y se debe hacer una cita para realizarla.