Ciudad Juárez, Chih. Autoridades estadunidenses deportaron ayer por el puente internacional Zaragoza a poco más de cien indocumentados de El Paso, Texas, a Ciudad Juárez. El gobierno del presidente Joe Biden ha expulsado a cientos de migrantes en sus primeros días, a pesar de que prometió en campaña que cesaría las expulsiones.

Las recientes deportaciones fueron por orden de un juez federal, quien en respuesta a una petición del gobierno estatal de Texas, impidió a la administración de Biden aplicar una moratoria de 100 días a las expatriaciones, y el fallo no requería que el gobierno del país vecino las programara.

A su vez, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos deportó la semana pasada a 15 personas a Jamaica, así como 269 a Guatemala y Honduras.

Personal del Consejo Estatal de Población recibió este miércoles en Juárez a los nuevos expulsados, que eran en su mayoría mexicanos capturados en días recientes por elementos de la Patrulla Fronteriza.

Funcionarios del Instituto Nacional de Migración comenzaron a trasladarlos a albergues de la localidad, a lo que se opusieron más de 20 connacionales, quienes permanecieron en inmediaciones del puente.

El encargado del programa de atención a migrantes de Chihuahua, Luis García, comentó que entre los hombres retornados figuraron haitianos que hasta hace unos días residían en Ciudad Juárez, y se internaron en territorio estadunidense sin documentos.

Un migrante que se identificó como Wilber, originario de Veracruz, expresó que llegó a Juárez en autobús hace tres semanas, y cruzó la frontera luego de contratar a polleros; pidió asilo en Estados Unidos, se le negó y fue deportado.

Durante su campaña presidencial, Biden y su vicepresidenta Kamala Harris objetaron las prioridades del gobierno de Donald Trump en materia de inmigración.

Ante las nuevas deportaciones Melissa López, directora ejecutiva del organismo sin fines de lucro Diocesan Migrant & Refugee Services (Servicios Diocesanos para Migrantes y Refugiados), pidió a Biden y Harris en entrevista con la agencia Ap que “se percaten de que, a pesar de sus deseos muy claros sobre el trato que se les da a los migrantes, seguimos viendo a indocumentados que son maltratados e ignorados a escala local”.