Ciudad Victoria, Tamps., Doce miembros de la policía estatal fueron detenidos por su presunta participación en el homicidio de 19 personas, 13 de ellas originarias de Guatemala, que fueron halladas incineradas en el poblado de Santa Anita, municipio de Camargo, el pasado 22 de enero, informó la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas.
El fiscal general Irving Barrios Mujica detalló, en rueda de prensa, que los efectivos estatales enfrentan cargos por homicidio calificado, abuso de autoridad y falsedad de información proporcionada a sus superiores.
Destacó que los detenidos quedaron a disposición de un juez de control, quien, con base en datos proporcionados por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal, al menos 12 de sus elementos figuran como presuntos responsables del homicidio de 19 personas.
Además, los arrestados enfrentan cargos de carácter administrativo conforme al reglamento interno de la SSP estatal.
Según las investigaciones de la autoridad judicial, los policías implicados en el homicidio múltiple “limpiaron la escena del crimen para evadir la aplicación de la justicia”; sin embargo, la fiscalía acreditó la participación de los agentes.
La fiscalía precisó que 13 de las 19 personas calcinada son de origen guatemalteco, luego de que 13 familias se acercaron a la autoridad judicial para colaborar en el reconocimiento de sus parientes.
El homicidio e incineración de 19 personas ocurrió en el poblado Santa Anita, donde los cadáveres fueron encontrados calcinados en la caja de una camioneta tipo pick up, la cual tenía 113 disparos.
También fue hallada otra camioneta en ese lugar, la cual fue confiscada días antes por agentes de migración.
La ciudad de Camargo se localiza sobre la carretera ribereña, en la denominada frontera chica tamaulipeca, entre los municipios de Gustavo Díaz Ordaz y Miguel Alemán, donde durante 2001 la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales de Delitos contra la Salud desplegó un operativo para aprehender a Gilberto García Mena, alias El June.
Durante 2017, elementos de la policía estatal estuvieron involucrados en ejecuciones extrajudiciales en el municipio de Nuevo Laredo; además se les ha vinculado, según fuentes, a un grupo especial de la SSP tamaulipeca.
En 2015, integrantes de esa corporación, entre ellos un comandante de la policía estatal, atacaron a un grupo de jóvenes en el municipio de Tula, durante un fin de semana, donde murió uno de los agredidos a consecuencia de impacto de bala que recibió en la espalda, disparada por un arma oficial.