Madrid. España, uno de los países de Europa más afectados por la pandemia, superó este miércoles el umbral de los 60 mil fallecidos oficialmente por coronavirus, según el ministerio de Sanidad.
El país, de 47 millones de habitantes, suma desde el inicio de la pandemia 60 mil 370 muertos y casi 2.9 millones de contagios, según el último boletín del ministerio de Sanidad.
En las últimas 24 horas se reportaron 565 fallecidos.
Al igual que en muchos otros países, el balance oficial está subestimado, ya que al inicio de la epidemia, la pasada primavera, muchas víctimas no fueron sometidas a diagnóstico debido a la saturación del sistema sanitario.
En diciembre, el Instituto Nacional de Estadística estimó que unas 45 mil 600 personas fallecieron en España a causa de Covid-19 entre marzo y mayo, es decir unas 18 mil 500 más que lo reportado en ese período en el balance oficial.
La cifra no fue incorporada por el ministerio de Sanidad, cuyo balance incluye sólo a aquellos cuya muerte ha podido atribuirse al coronavirus de manera certera, gracias a un test.
Por otro lado, el número de casos confirmados se eleva a 2 millones 883 mil 465, de los cuales 31 mil 596 en las últimas 24 horas.
Tras decretar en primavera uno de los confinamientos domiciliarios más estrictos del mundo, y que traumatizó a buena parte de la población, el gobierno del socialista Pedro Sánchez se niega de momento a reaplicar esa medida, mientras que otros países vecinos ya han tomado medidas en ese sentido.
El ejecutivo español considera que el actual estado de alarma, adoptado en octubre y en vigor hasta mayo, otorga a las regiones, competentes en gestión sanitaria, las herramientas suficientes para combatir la pandemia, como toques de queda nocturnos, cierres de bares y restaurantes y limitaciones a la libertad de circulación.
Algunas regiones presionaron no obstante al gobierno para poder adelantar la hora de aplicación del toque de queda, o incluso confinar en casa a la población, sin éxito hasta el momento.
España administró hasta la fecha casi 1,8 millones de dosis, y espera haber inmunizado al 70% de su población de aquí al final del verano, un objetivo reafirmado recientemente por el gobierno pese al retraso en las entregas de dosis por parte de los laboratorios farmacéuticos.