Cuernavaca, Mor. Los dueños de 900 jardines y salones de eventos de la entidad, la mayoría al aire libre, en donde se pueden realizar diferentes tipos de fiestas —bodas, quinceaños, bautizos y otro tipo de celebraciones—, demandaron al gobierno del estado, la Secretaría de Salud y a Protección Civil, les permita reabrir con las medidas sanitarias y protocolos correspondientes para evitar contagios de Covid-19 porque, aseguraron, esta industria aún permanece cerrada por la pandemia está a punto de “morir”.
Néstor Figueroa y Angélica Jaramillos Fricas, representantes de esta industria conocida como "turismo del romance", hicieron esta petición en conferencia de prensa, y arguyeron que llevan ocho meses totalmente cerrados, y que sólo se les permitió abrir del 15 de septiembre a mediados de diciembre pasado, tiempo en el que Morelos estuvo en color amarillo del semáforo de riesgo de Covid-19.
La urgencia de reapertura, reiteraron, responde a que tales empresas generan 25 mil empleos directos durante la semana y 62 mil empleos indirectos los sábados y domingos.
Abundaron que al año generan una derrama económica de ocho mil 424 millones de pesos; recursos que el estado de Morelos dejó de percibir durante 2020, y en lo que va de este año.
“Convocamos a las autoridades de Salud (estatales), de Protección Civil del estado y de los municipios, para que juntos revisemos de qué forma aseguramos la integridad de nuestros clientes, y de nuestro personal que hoy sufre y feo.
“Estamos aquí para que allá en donde se toman las decisiones oficiales estén bien enterados que acá, donde sobrevive parte de una industria que ha hecho grande a Morelos, y nos ha beneficiado a todos, hoy estamos a un punto de colapsar, a punto de quebrar”, dijo Angélica Jaramillo Fricas.
Advirtieron que si el gobierno de Cuauhtémoc Blanco Bravo no les permite reabrir, ese sector va desaparecer, lo que acarreará más desempleo y pobreza en la entidad.
Según cifras que compartieron, antes de la pandemia al año realizaban alrededor de 46 mil eventos; en sus restaurantes se alimentaban 20 millones de personas, y dos mil personas alquilaban habitaciones.
Otras actividades y oficios que también han resultado afectados por el cierre son florerías, maquillistas, videógrafos, fotógrafos, mariachis, grupos musicales, cocineros, meseros, dueños de plantas de luz, sonideros, entre otros.
Así también, durante la rueda de prensa ofrecida en la Finca El Amate, ubicada en Jiutepec, una decena de hombres y mujeres, trabajadores de tales sectores, se sumaron a la demanda con pancartas.
En la mesa principal se leía: “#Juntos Saldremos Adelante”, “Abrir o Morir” y “#UnidosSomosMásFuertes”.
Hasta el 2 de febrero la Secretaría de Salud, reportó en Morelos, 19 mil 70 casos confirmados y dos mil siete fallecimientos por Covid-19.