El bono demográfico, entendido como la ventaja de contar con población menor de 30 años, “está por agotarse”, y eso impactará en la formulación de políticas públicas en México, explicó Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación.
El censo 2020 revela que el crecimiento de la población fue menor a lo esperado; “el país envejece y muestra de ello es que la edad promedio ya es de 29 años”, detalló en un acto convocado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Sánchez Cordero explicó que, al respecto, ahora en el Congreso se busca que después de 30 años se tenga una cédula de identidad digital y para ello el insumo esencial son los datos recabados por el censo 2020.
Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, recalcó que los datos revelados advierten sobre los “millones de empleos que debemos crear cada año. Estamos preocupados, se necesita una política pública que fomente el crecimiento con dimensión social, porque hasta ahora vemos avances insuficientes”.