La Habana. Cubanos emigrados en Estados Unidos, junto con ciudadanos estadunidenses y de otros países, marcharon ayer en Miami, Nueva York, Los Ángeles y Seattle para exigir a la Casa Blanca la eliminación del bloqueo económico, comercial y financiero que Washington impone a La Habana desde hace casi seis décadas.
“Demócratas, republicanos, cubanos y no cubanos, gente de diversos credos e ideologías de todo el mundo, elevaremos nuestras voces para pedir al presidente Joe Biden el fin de las sanciones económicas que pesan sobre la familia cubana”, expresa una nota de prensa divulgada por la organización Puentes de Amor, que lidera el profesor cubanoestadunidense Carlos Lazo.
Caravanas de automóviles y bicicletas desfilaron por las ciudades estadunidenses; llevaban banderas de Cuba y Estados Unidos, así como pancartas con consignas en demanda del fin del bloqueo a la isla.
Hay un tiempo para el rencor y otro para el perdón. Hay un tiempo para la oscuridad y otro para la luz. “Hay un tiempo para el odio y otro para el amor. Esta es la era del amor ¡La familia es sagrada! Caminemos juntos por los Puentes de Amor”, señala el comunicado.
Según informaciones ofrecidas a Sputnik por el periodista cubano residente en Estados Unidos Carlos Rafael Diéguez, de la emisora Radio Miami-Tv, en la caravana de su ciudad participaron cerca de mil automóviles, quizá la mayor que se haya visto en los últimos años.
Los manifestantes exigieron también la normalización de relaciones entre los dos países, que se restablezcan los servicios consulares y se abran nuevamente las embajadas, tanto en Washington como en La Habana, la autorización de remesas y que se permitan los viajes de estadunidenses a la isla.
Diéguez precisó que durante la marcha en Miami se hizo un alto frente al monumento a José Martí (1853-1895) en Coral Gables, donde se depositaron flores blancas en homenaje al 168 aniversario de su nacimiento, el 28 de enero.
El pasado 11 de julio, el profesor Carlos Lazo, emigrado cubano residente en Seattle y ex sargento veterano de la invasión a Irak, comenzó un recorrido en bicicleta de más de 5 mil kilómetros en compañía de sus hijos, para exigir el fin del bloqueo contra Cuba y la reanudación de relaciones entre ambos países.